Sin Kuran, Moisés ni Quintas, pero con el jugador del Automanía Luceros Ángel Rodríguez en la convocatoria. Así afrontará el Frigoríficos del Morrazo el encuentro que esta tarde (18.30 horas, Pabellón Polideportivo El Sargal, con el arbitraje de los madrileños Macías de Paz y Ruiz Vergara) lo mide al Liberbank Ciudad Encantada de Cuenca, segundo clasificado de la Liga Asobal y único equipo junto al Barcelona que cuenta sus partidos por victorias.
Y es que la semana ha sido especialmente movida en cuanto a problemas físicos. Si el pivote Quintas no ha acabado de recuperarse del proceso vírico gastrointestinal que arrastra desde hace días y que ya le impidió jugar ante el Logroño La Rioja, la lista de bajas se ha incrementado con Kuran (con un golpe en el pulgar de uno de sus pies) y Moisés (con molestias en los isquiotibiales). Aunque los problemas no son de consideración, la cercanía de los duelos ante Nava y Sinfín, rivales directos en la lucha por la permanencia, hacen que Nacho Moyano haya optado por no arriesgar y por dejarlos en Cangas. El canterano Ángel entra por vez primera esta temporada en la lista y todo apunta a que disputará minutos en su nueva posición de central. De este modo, los 16 elegidos son los porteros Javi Díaz y Forns; los extremos Menduiña, Vujovic y Carlos Vilanova; los pivotes Cerqueira y Pablo Castro; los centrales Rubén, Doder y Ángel Rodríguez; y los laterales Brais, David Iglesias, Muratovic, Peiró y Mitic.
El equipo cangués es consciente de las dificultades de sorprender en su feudo a uno de los conjuntos más potentes de la categoría, que además atraviesa un momento dulce, pero quiere al menos recuperar sensaciones y volver a mostrar la alegría en el juego que pudo verse en el estreno de la temporada ante el Fraikin Granollers. Defender con dureza y explotar ese acierto en la salida al contragolpe son las dos premisas en las que insiste Nacho Moyano, sabedor de los réditos que esta filosofía puede darle a los suyos. Ajustar el rendimiento de un 6.0 que poco a poco ha ido adquiriendo consistencia será determinante.
Pero otra de las cuestiones que el Cangas situará encima de la mesa es de su competitividad a domicilio, una de sus históricas debilidades. Ante el Guadalajara el equipo no completó un buen partido y frente al Logroño brilló durante 27 minutos para acusar después el carrusel de exclusiones y sucumbir con claridad en el segundo periodo. Mantener la tensión durante los 60 minutos ha sido el mantra repetido esta semana y con él se quiere pelear en Cuenca.
Frenar a Dutra
En los aspectos puramente deportivos la preocupación será frenar las embestidas de un conjunto conquense bastante completo. Anular a Dutra, auténtico cañonero local, es una de las obsesiones, pero sin descuidar a otros integrantes de la primera línea con capacidad de hacer daño, como Natán con su verticalidad o los zurdos Eskericic y Fekete con su lanzamiento exterior. Quizás más atención habrá que mostrar en ataque para finalizar todas las acciones con una buena selección de tiro, evitando de este modo el contragolpe conquense, bien lanzado por el meta Maciel y culminado generalmente por el extremo Sergio López.
