Tuvo su oportunidad ante el Atlético Valladolid y ayer pudo estrenarse ante su afición. No le temblaron las piernas al jovencísimo Javi Fernández por jugar en un pabellón de O Gatañal lleno y ante todo un Fútbol Club Barcelona. El todavía juvenil de primer año calentó con sus compañeros y esperó pacientemente la oportunidad que iba a tener seguro a lo largo del choque.

Fue el jugador más ovacionado en la presentación, demostrando cómo O Gatañal cuida a los suyos, y recibió otra ovación cuando se preparó para saltar a la pista. Lo hizo en el minuto 44 en medio de los aplausos de su público. Desde entonces la atención se centró en aguardar por su primera intervención. El marcador hacía tiempo que no importaba a nadie. Los primeros uyyyy se oían en las gradas ante los tantos de Ilic, Gilberto o Fábregas. Pero esa parada llegó. El cangués sacó un balón en el minuto 28 y esbozó una sonrisa mientras el público y el banquillo estallaban de júbilo.