balonmano - Primera Nacional
Un punto de oro en el infierno
El Luceros remonta dos goles en los últimos tres minutos ante el Camariñas pero encaja el empate en la última jugada
Redacción | Cangas
El Luceros sumó un punto de oro en su visita al infierno de Camariñas (29-29) en un duelo absolutamente loco en su recta final y en el que los cangueses pasaron de remontar dos goles de desventaja con un jugador menos en pista a encajar el empate local en la última acción del choque.
Los de Miguel Santorio plantearon un encuentro serio, con David Iglesias y Pousa asumiendo galones y martilleando la portería coruñesa para dar rentas a su equipo a lo largo de un disputado primer tiempo. Los cangueses llegaban mejor y apuraron en el marcador hasta el 11-15 a falta de dos minutos para el paso por vestuarios. Sin embargo, dos exclusiones de Pablo Castro y David Veloso -los colegiados obviaron la dureza local y castigaron de diferente modo a los visitantes- permitieron al Camariñas llegar vivo al descanso (13-15).
En la reanudación pronto igualaron los locales, pasando a jugarse un partido con múltiples alternativas en el marcador. Hasta que los coruñeses se pusieron dos arriba (28-26) con discutida exclusión de Pousa. Santorio pidió tiempo muerto y arriesgó jugando sin portero para igualar y posteriormente para culminar la derrota ya con todos en pista (28-29). Faltaba un último ataque para el Camariñas, que se jugó todo en una acción individual de Alberto Mas -en unos posibles pasos- que acabó con el gol que ponía el definitivo 29-29 en el electrónico. Los cangueses siguen fuera del descenso.
- «Vivo con la angustia de si va a conseguir salir para quitarse la vida»
- Qué es el mieloma múltiple, el cáncer incurable que sufría el presentador de TVG Xosé Manuel Piñeiro
- Marián Mouriño le promete un empujón a la audiencia de Broncano: «No puedo dedicarte goles, pero te voy a dar un patrocinio»
- El ciclón bomba Éowyn asusta en Irlanda, mientras Galicia incrementa las alertas
- Allariz despide a su ilustre vecino Superpiñeiro que deja un emotivo mensaje en su esquela
- Una deuda de 215.000 euros ahogó la segunda vida del clásico restaurante Follas Novas de Vigo
- Muere de repente un vecino de Bueu en la rampa del muelle
- Querido Piñeiro