El entrenador del Frigoríficos del Morrazo, Magí Serra, achacó al cansancio el flojo partido de los suyos a nivel ofensivo ante el Ciudad Encantada de Cuenca. "Ellos jugaron el sábado, tuvieron un día más de descanso, y yo creo que nos pasó factura el encuentro ante el Alcobendas, en el que tuvimos que correr mucho y hubo bastante desgaste", señala el catalán.

Serra reconoció que "estuvimos muy imprecisos, con pocas ideas y no jugamos a lo que sabemos". De hecho, los primeros lanzamientos, muy poco localizados, marcaron una tendencia. "Abusamos mucho del lanzamiento exterior, que no es nuestra virtud", y apuntó que "o lo achacamos a un problema mental o a uno físico, y mentalmente el equipo está muy bien".

Con todo, apunta también a la calidad de un Cuenca que, en su opinión, "debería de estar más arriba en la tabla" y que llegó enrabietado a los dos duelos ante el Cangas. "En la primera vuelta venían tras la paliza ante el Barcelona y en esta tras haber caído de forma clara con el Oporto", razona. Asume que durante la segunda mitad "optamos por correr riesgos adelantando la defensa y salimos al contragolpe, pero fallamos ocasiones que nos hubiesen permitido engancharnos al partido".