El Balonmán Cangas se despidió ayer a las primeras de cambio de la Copa del Rey tras perder 31-25 con el Fertiberia Puerto Sagunto. El conjunto valenciano consumó su venganza puesto que la derrota de la pasada campaña en O Gatañal le condenó al descenso de categoría. Los locales fueron por delante casi en todo momento y castigaron la táctica del Cangas, que durante muchos minutos jugó con siete jugadores de campo y sin portero. Una apuesta que en el primer tiempo le salió bien, pero que tras el descanso propició demasiados goles a puerta vacía.

El arranque del partido estuvo marcado por la igualdad y por las buenas intervenciones de los dos veteranos porteros, David Bruixola por Puerto Sagunto y Javi Díaz por el Cangas. Tras esos primeros compases el equipo entrenado por Vicent Noguerés logró abrir el primer hueco en el electrónico. El técnico de los cangueses, Magí Serra, tuvo que pedir tiempo muerto en el minuto 9, con un 5-2 y tras encajar un parcial de 3-0. La diferencia llegó hasta el 6-2 (min.13), con un Cangas que sufría en ataque, donde se encontraba una y otra vez con Bruixola o bien con los palos. Fue Aranda quien rompió una sequía de casi diez minutos sin anotar, aunque la diferencia local llegó hasta una máxima de seis goles (9-3, min.18).

Esta situación forzó al Cangas a jugar sin portero para buscar la superioridad numérica en ataque. Aunque encajó un par de goles a puerta vacía la táctica funcionó. Con Dani Cerqueira y Pablo Castro jugando juntos en ataque, con David Chapela y Rubén Soliño a los mandos y con tres goles de Aranda los cangueses lograron un parcial de 3-7 para alcanzar un 12-11 al descanso.

La remontada canguesa culminó en los primeros instantes del segundo tiempo, con un contragolpe culminado por Gavidia que ponía el 13-14. Fue un espejismo. Constituyó la primera y única ventaja canguesa. A partir de ahí un pacial de 6-1 para el Puerto Sagunto, que sacó provechó de la precipitación del Frigoríficos en ataque y de sus errores. En un visto y no visto se puso con un 19-15 que obligó a Magí Serra a pedir un tiempo muerto.

Los cangueses recurrieron al ataque con siete hombres, pero en esta ocasión los locales estuvieron más acertados. Tanto a la hora de robar en defensa para hacer veloces contragolpes como para anotar a puerta vacía desde su área, incluyendo un par de tantos de David Bruixola. La diferencia volvió a situarse en el umbral de los seis goles (22-16 y 23-17), lo que provocó un nuevo tiempo muerto de Magí Serra en el minuto 46.

Cambio defensivo

Los cangueses dejaron su defensa 6.0 y cambiaron a un 5.1 con Aranda como avanzado, lo que de primeras le permitió sorprender al Fertiberia y recortar diferencias con dos goles consecutivos de Pablo Castro y Aranda tras detener Javi Díaz un siete metros a Corzo. En todo caso fue un espejismo. Los de Vicent Noguerés siguieron marcando de manera fácil y consiguieron estabilizar su ventaja en los seis goles, hasta el 31-25 final.

Después de esta derrota el Cangas volverá a la liga, donde tiene que pensar ya en el encuentro que este sábado jugará en O Gatañal contra el Benidorm. El partido será a las 18.30 horas.