Completar un buen papel y salir del choque con buenas sensaciones. Esos son los principales objetivos del Frigoríficos del Morrazo en el duelo que mañana (19 horas, Palau Blaugrana, con el arbitraje de los catalanes Luque Cabrejas y Pascual Sánchez) afronta ante el Fútbol Club Barcelona tras la derrota del sábado ante el Atlético Valladolid. Y es que a la evidente superioridad del vigente campeón de la Liga Asobal se unen las importantes ausencias con las que los cangueses afrontarán este encuentro, en el que pensar siquiera en puntuar es una quimera. En los 16 precedentes existentes siempre hubo victoria local por una diferencia de al menos nueve goles. A los lesionados Moisés y David Iglesias se han unido los veteranos Alen Muratovic y Suso Soliño, a quien el club desea reservar para citas más importantes.

De este modo, serán 13 los integrantes de la expedición del Cangas, que parte mañana vía aérea con destino a la Ciudad Condal. Los elegidos son los porteros Javi Díaz y Galán; los centrales Chapela y Rubén; los laterales Aranda, Mitic, Gavidia y Ángel Rodríguez; el universal Cancio; los pivotes Cerqueira y Pablo Castro; y los extremos Menduiña y Vujovic. Los huecos son evidentes en el lado izquierdo del ataque cangués, lo que obligará a Magí Serra a improvisar soluciones. Sin un lateral específico las opciones sobre la mesa son las de Chapela, Vujovic e incluso Ángel Rodríguez en un choque especialmente propicio a las probaturas.

“Nosotros nos vamos a marcar nuestros objetivos internos y ver si los cumplimos para salir del Palau con buenas sensaciones independientemente del resultado”, afirma. El preparador de los de O Morrazo asume que “el Barcelona este año lo corre todo, marca un ritmo inhumano, y si no eres capaz de seguirlo pues estás muerto”. Los precedentes están muy cerca. El Alcobendas cayó 24-50, el Cuenca lo hizo por 43-22 y el Atlético Valladolid por 24-41. Solamente el Bidasoa pudo mantener el tipo y perder de forma digna (32-23). “Nuestro hándicap añadido es que nos faltan jugadores importantes, así que lo que tenemos que hacer es aprovechar para que dispongan de minutos los menos habituales y sea su momento para reivindicarse”, asegura.