El 0-3 encajado el domingo en el campo de O Morrazo fue un jarro de agua fría para la afición alondrista, que a la salida del choque veía muy complicado remontar la eliminatoria y seguir con vida en la lucha por ascender a la categoría de bronce del fútbol español. De todas formas, a medida que avance la semana la posibilidad de llevar a cabo una heroicidad flotará en el ambiente. El club está estudiando las opciones para poner un autobús que desplace a parte de la afición a Langreo este domingo, aunque no está garantizado. Dependerá de las posibilidades reales de llenar un vehículo cuyo coste sería elevado. Y es que la eliminatoria ya implicará un coste grande a las arcas del club, pues los jugadores partirán el sábado para Asturias, con objetivo de dormir en Langreo y que lleguen al partido de vuelta lo más descansados posible. El entrenador apeló ayer a la afición para asegurarles que "vamos a competir y defender el escudo de Alondras como lo hicimos toda la temporada".