A sus 32 años ejerce de líder en un equipo que vive uno de los mejores momentos de los últimos años. Las derrotas ante Villalbés y Boiro han frenado a un Alondras que quiere volver a engancharse venciendo el domingo al Barbadás. Y Mauro expresa plena confianza en las posibilidades de los suyos.

- Han sido una pena los dos últimos resultados ante Villalbés y Boiro, que los descuelgan un poco de la lucha por la promoción.

- La verdad es que sí. Teníamos mucha ilusión y creo que ninguno de estos dos equipos fue mejor que nosotros, pero ya hay que pensar en el próximo partido. Seguiremos intentándolo.

- La temporada está siendo extraordinario para un equipo tan renovado, con entrenador nuevo y que partía con otras expectativas.

- Sí, hay gente muy joven, pero desde el principio nos salieron bien las cosas. Confiamos mucho en nosotros mismos para estar arriba, desde la humildad, aunque es cierto que a la gente joven le puede afectar un poco la presión. Quizás ante Villalbés y Boiro quisimos ganar demasiado pronto y encajamos goles, pero acabamos los partidos metiéndolos en su área. Si hubiésemos tenido más paciencia y dejado la portería a cero los resultados habrían sido distintos.

- Se enfrentan el fin de semana al Barbadás en una jornada que puede ser propicia, ya que hay un Arosa-Compostela y un Barco-Somozas.

- Hay varios enfrentamientos directos, y a nosotros aún nos quedan unos cuantos, pero tenemos confianza. Esta temporada es una gran oportunidad para la gente joven, porque entrar en una fase los revaloriza.

- El calendario que les queda es durísimo, con duelos ante cinco de los seis primeros clasificados.

- Sí, pero al Somozas, por ejemplo, les ganamos en casa sin que ellos llegasen a nuestra portería. Podemos ganarle a cualquiera pero también es cierto que perdimos cuatro puntos con el colista [el Vilalonga]. Estos partidos se decidirán por detalles.

- ¿Qué es lo que ha cambiado en este equipo para pasar de varios años decepcionantes a uno tan ilusionante?

- Pues que somos un equipo joven, con mucha ilusión. Somos como una pequeña familia en el vestuario, nos animamos los unos a los otros y eso es lo que hace un equipo. Otros años no había este ambiente tan bueno.

- Cuentan con una plantilla corta pero muy polivalente.

- Es la suerte que tenemos, y que apenas hayamos tenido lesiones. Hay mucha variedad. Yo puedo jugador por dentro o en banda, Álex Rey también y en punta. Tenemos muchas opciones.

- La lástima es que cuando por fin encuentran el delantero que estaban buscando pierden otro efectivo, Michael en este caso.

- Sí, fue una pena, como la de no haber podido contar con Jonás desde el principio. Pero el fútbol es así muchas veces.

- ¿Y qué tal se ha encontrado este año en el plano personal?

- A principios de temporada empecé muy bien, pero luego di un bajón importante. Ahora me vuelvo a encontrar muy bien en el campo, pero me está faltando el gol. Esta semana tuve una oportunidad clara en el 90 que no quiso entrar. Solo llevo cuatro goles pero es una cuestión de rachas. Y si no los meto yo, ya los meterá otro.