Reconectarse a la competición liguera y sumar dos puntos que lo situarían en una privilegiada situación para afrontar los decisivos meses de noviembre y diciembre. Ese es el objetivo que persigue el Frigoríficos del Morrazo en el encuentro que esta tarde (19 horas, pabellón de Artaleku, con el arbitraje de los canarios Sabroso Ramírez y Raluy López) afronta ante el Bidasoa. El conjunto cangués quiere dejar atrás la decepción del partido de Copa del Rey ante el Secin Group Alcobendas que supuso su eliminación de este torneo, y recuperar las sensaciones de Liga, en donde está ofreciendo un rendimiento más que aceptable.

"Hay que cambiar el chip, pero también la forma de jugar, aunque el perfil del partido ante el Bidasoa es diferente al de Copa", afirma el entrenador de los de O Morrazo, Víctor García, "Pillo". Y es que el preparador asume que la cita de hoy sería muy importante en caso de que los suyos consigan la victoria. "Si acabamos el mes con seis puntos nos pondríamos en una situación comodísima para encarar la recta final de la primera vuelta y hacerlo con buena nota", señala, antes de añadir que "ir a un parón después de conseguir dos puntos nos daría mucha tranquilidad. Todo serían connotaciones positivas en caso de ganar".

David Iglesias, única baja

La de David Iglesias, con una fractura del tabique nasal, será la única baja en la expedición de los cangueses, que llegó esta tarde a Irún procedente de Madrid, en donde pernoctó tras el duelo de Copa. Por la noche tenía prevista su llegada a la ciudad vasca el lateral Serafín Pousada, que se incorpora más tarde por cuestiones laborales. De este modo, Pillo presentará una convocatoria con los porteros Hermones y Salazar; los centrales Rubén y Simic; los laterales Chapela, Muratovic, Ángel Rodríguez, Serafín y Potic; los pivotes Cerqueira y Pablo Castro; los extremos Moisés, Suso Soliño, Menduiña y Vujovic; y el defensor Maxi Cancio.

La intención del Cangas es recuperar su estilo y fundamentar su posible victoria en la fortaleza defensiva, respaldada por la actuación de sus porteros, y por mostrar una mayor solidez en sus acciones ofensivas. El conjunto gallego deberá mejorar no solamente sus decisiones a la hora del juego para evitar pérdidas de balón, y también afinar más la puntería para obtener mejores porcentajes de lanzamiento. Todo orientado a frenar la posibilidad del contragolpe rival, aún sin ser el Bidasoa un equipo que explote tanto el juego veloz como hizo el Alcobendas.

Enfrente estará un Bidasoa que también sufrió el golpe anímico de la eliminación copera -perdió ante el Sinfín 29-28- y que en Liga no ha acabado de mostrar la mejor cara de una escuadra a priori llamada a ocupar puestos en la zona tranquila de la clasificación. Por el momento suma los mismos puntos que el Frigoríficos, cuatro. "Quizás ellos tengan un equipo con más ambición, con más objetivos que el nuestro, pero la competición es así y la Asobal es canibalismo", afirma, antes de añadir que "para ellos el partido es una auténtica final porque si pierden se meterán en un berenjenal importante, y no solo a nivel deportivo".