El Alondras se vistió ayer de corto. 280 jugadores de las 13 plantillas de la entidad participaron en la presentación oficial, ante varios cientos de aficionados. Desde el equipo prebenjamín hasta el juvenil de División de Honor. Uno a uno fueron llamados todos los jugadores del Alondras que saltaron al césped entre aplausos del respetable.

La plantilla del primer equipo fue la más reconocida. Pese a la revolución en materia de fichajes, la afición se mostró ilusionada. El propio alcalde, Xosé Manuel Pazos, pidió a los jugadores que "estean a altura da ilusión que xeraron esta pretemporada. Na que incluso lle gañaron ao Coruxo". El discurso del regidor contó con un recuerdo a las víctimas del atentado de Barcelona. Tras un sonoro aplauso, Pazos contrapuso "o deporte como forma de vida" con la muerte que representa la barbarie yihadista.

Mientras salían los jugadores de la primera plantilla, los aplausos se concentraron en los veteranos como Champi, definido por megafonía como un "centrocampista de calidad y llegada". Otros de los nuevos fichajes también fueron muy aplaudidos, como Pablo Salgueiro, del que se destacó su participación en las categorías inferiores de la Selección española. Pero sin duda el mayor reconocimiento se lo llevó Mauro, el nuevo capitán, que fue el último en saltar al césped.

El portador del brazalete también puso la emoción en las gradas al iniciar su discurso recordando a Andrés, Castilla y Rubén. Tres pilares del Alondras durante muchos años y que ya no formarán parte del equipo esta temporada. Agradeció la "dedicación y compromiso que tuvieron con este club".

Tras pedir a los jugadores de la cantera que luchen "por ser mejores en cada partido". Mauro definió a sus nuevos compañeros como "un equipo con gente joven y con mucha ilusión". Solo prometió "no dar un balón por perdido y luchar en cada partido".

El entrenador, Antonio Fernández, apeló en su primer discurso ante la afición alondrista a la "humildad y predisposición al trabajo", que caracterizan a la plantilla que dirigen "y que son cualidades importantes para conseguir el éxito". Reclamó el apoyo de la afición esta temporada y aseguro que partían con la intención de "ilusionar" a la grada.

También tomó la palabra la Diputada de Deportes Chelo Besada. Recordó que el Alondras se acerca a su centenario, para enfatizar la importancia del club en la historia del deporte cangués.

El presidente, Luis Guimeráns, optó en esta ocasión por un discurso breve y comedido, en el que apeló sobre todo a no pasar apuros para que el Alondras continúe peleando más años en el fútbol nacional.

El acto contó con actividades lúdicas como las coreografías que pusieron sobre el césped, con camisetas rojiblancas incluidas, los integrantes del grupo de danza moderna Boombox.