Tres largos para vivir atascado y sufrir y uno último para volar y salvar los muebles. En esta frase podría resumirse la regata que ayer completó la Sociedad Deportiva Tirán, y en la que acabó con un décimo puesto que sabe a mucho después del desarrollo de una prueba incómoda y muy marcada por las variables condiciones de viento y corrientes.

Los moañeses no encontraron su ritmo en uno de los campos de regata más volubles del campeonato. A ello pudo influir la revolución que José Ángel Cambados, "Truco", realizó en la trainera. Sin él, lesionado en la espalda, hizo debutar en la Liga ACT a hombres como Alberto Hermo y varió de posición a otros, como a Suso Hermelo, que en esta ocasión remó en popa. Si a eso se le suma unas condiciones adversas en cuanto a viento y corrientes, el resultado fue un equipo que no tuvo las mismas sensaciones que la semana pasada y que estuvo fuera de sitio durante demasiado tiempo.

La presión ya la habían metido las embarcaciones de la primera tanda, que disfrutaron de unas mejores condiciones y marcaron tiempos difíciles de batir. No fue así en cambio para un Ziérbena Bahías de Bizkaia que a la tercera demostró su calidad. Comenzó con una inusual fortaleza y en la contrarreloj de ayer fue marcando los mejores registros, sin ceder un ápice. Cabo da Cruz cumplía y San Juan aventajaba a una Mar do Con que iba a rebufo, a una distancia de entre 2 y 4 segundos de su principal rival en tanda. Lo cierto es que al paso por la tercera ciaboga las perspectivas para la Sociedad Deportiva Tirán Pereira no eran las mejores. Marcaba el peor tiempo de los ocho equipos que hasta ahora habían estado en el agua, y su desventaja era de dos segundos con San Juan, siete con Astillero y diez con Cabo da Cruz.

Pero la tripulación patroneada por David Álvarez no había dicho su última palabra. A favor de corriente voló en el último largo, dejándose hasta la última gota de aliento, en una verdadera carrera contra el crono para evitar las dos últimas plazas. Pronto superó la referencia de Astillero, poco después la de San Juan e incluso llegó a rozar el tiempo de Ares. Su rendimiento en el cuarto largo quedó fuera de toda duda. Sacó cuatro segundos a Ziérbena, seis a Cabo y siete a San Juan. Y con respecto a la tanda anterior ganó entre 12 y 18 segundos a sus rivales. Fue suficiente para asegurar la décima plaza, toda vez que no se preveían sorpresas con la tanda de honor.

Y eso que el viento hizo que le costase a los grandes entrar en regata. Sin embargo, en los largos de vuelta su potencia se hacía notar. Hondarribia tomó pronto el mando con un Urdaibai Avia que seguía su estela, pero sin conseguir sobrepasar a los verdes. Kaiku y Orio Babyauto peleaban por atrás, con los de Sestao llevándose el gato al agua, pero no la tercera plaza final, que fue para la sorprendente Ziérbena.

Al término de la regata Truco se sentía aliviado. "Salimos bastante vivos. Hicimos muchos cambios, con gente que nunca había remado en la ACT, con variaciones de puesto...", señala. El entrenador de los moañeses admite que "cogimos poco ritmo y lo veíamos en los tiempos intermedios. Luego hicimos un buen último largo, pero una regata es más que ese último largo. Las sensaciones fueron que el barco no iba como el otro día". Las condiciones meteorológicas y del campo de regatas fueron decisivas para todos. "Las mejores condiciones fueron en la primera tanda, porque no había tanta fuerza en la marea y el viento no sopló tanto como en la nuestra", apunta.

Para hoy (12 horas, Bandera Giroa Veolia, San Sebastián) los moañeses intentarán mejorar en mar abierto sus prestaciones. Truco anticipa que habrá cuatro cambios y dos rotaciones en el equipo.