Eduardo Torres Rosendo, conocido de forma deportiva como #Edu16, tiene apenas 7 años y ya corre a todo gas por circuitos de toda España en el marco del Campeonato de España de Minivelocidad. Al menos en la primera prueba de este torneo, disputada el pasado fin de semana en el circuito de velocidad de Alcalá del Río (Sevilla), este pequeño fue el único piloto gallego en liza.

Eduardo Torres compitió contra pilotos mayores que él, de entre 8 y 11 años en su mayoría, pero no se dejó amilanar. Tras los entrenamientos libres del viernes, el sábado tuvo que competir para conseguir una buena posición de salida. Tuvo que sufrir el lastre de que su moto se viese penalizada con 3,5 kilos de plomo debido a su escaso peso. Esto hizo que el vehículo fuese menos manejable en las curvas y más lento en las rectas. Acabó los entrenamientos oficiales en el puesto 34º en una prueba a la que se presentaron 39 pilotos de toda España.

Desde su posición de salida y con el objetivo fijado de finalizar entre los 30 mejores, ya desde la primera manga del domingo Edu fue adelantado rivales hasta finalizar en el puesto 26º. En la segunda manga, que comenzó con bastantes caídas, el joven moañés pudo mantener la concentración y adelantó de nuevo a ocho competidores.

Al inicio de la tercera y última carrera, más animado por los resultados de las dos mangas anteriores, consiguió firmar una fantástica salida y llegó a la meta en la posición 24, su mejor puesto de toda la jornada.

Este pequeño, que con apenas 7 años solo tiene por delante margen de mejora en el mundo del motor, volverá ahora a su rutina de entrenamientos, que compagina con el colegio. La cita del próximo fin de semana será en la localidad gallega de Monforte de Lemos, en donde a buen seguro que consigue otro gran resultado.

El pequeño Eduardo Torres Rosendo demostrará a su tierna edad si se confirma esta temporada como una promesa de futuro para el motociclismo moañés. Y es que el seguimiento que tenía el piloto Dani Rivas y el multitudinario entierro que se vivió en agosto de 2015 en Moaña demostró que el motociclismo es una disciplina seguida de forma masiva en Moaña.