El Frigoríficos del Morrazo sigue vivo. Muy vivo. El conjunto cangués ganó esta tarde 31-26 al Bada Huesca en un partido intenso, emocionante y en el que estuvo espoleado en todo momento por la afición de O Gatañal, que no cesó de animar al grito de “sí se puede”. El triunfo es más importante si cabe porque tanto el Benidorm, que viene por detrás, como el Sinfín, que está tres puntos por delante, ganaron sus respectivos encuentros.

La importancia del choque para los cangueses era palpable desde el primer minuto y enseguida logró ponerse tres goles arriba (6-3, 7-4). A pesar de la presión de la situación el Cangas era capaz de mover con cierta tranquilidad el balón y buscar las mejores opciones. En este primer tiempo fueron esenciales los goles de Milosevic y Potic, ambos buscando constantemente la portería rival. No obstante, Oier García castigaba constantemente desde el extremo y sus goles mantenían con vida al Huesca, que tras un parcial de 0-3 empataba de nuevo el encuentro (7-7; 8-8). A ese parcial respondió de inmediato el Cangas con otro de 4-0, aupado por las paradas de Pedro Hermones, que esta tarde celebró a lo grande su recién estrenada paternidad. El Frigoríficos se puso con un 12-8 en el minuto 21, aunque al descanso esa ventaja quedó reducida a solo dos tantos (16-14).

El arranque del segundo tiempo mantuvo la tónica de igualdad entre ambos equipos, con el Cangas siempre por delante en el electrónico pero con ventajas de entre unos y dos goles. Las paradas de Hermones, incluyendo un lanzamiento de siete metros a su compatriota Teixeira, y dos goles consecutivos de Nikola Potic permitieron al Frigoríficos estirar su ventaja hasta el 23-20 (min.45). Eran los momentos decisivos del encuentro, con el Huesca de nuevo apretando tras dos tantos consecutivos de Todorovic. Pero del 23-22 se pasó a un 28 -22 gracias a la buena defensa, a la aportación de la portería y a los goles de Cerqueira, Suso, Alen Muratovic y dos acciones consecutivas de un resolutivo Serafín Pousada. Fueron quizás los mejores minutos del choque y permitían al Cangas encarar con cierto optimismo los últimos diez minutos.

La tranquilidad, sin embargo, es algo que parece estar prohibido a este equipo. Durante algunos instantes sobrevoló el fantasma de lo ocurrido hace dos semanas ante el Puente Genil, con una defensa mixta a la desesperada del Huesca y con dos exclusiones consecutivas a Pablo y Eloy Krook que dejaron al Frigoríficos con cuatro jugadores en pista. Pero esta vez los cangueses supieron manejar la situación y esta vez, el triunfo y los dos puntos, se quedaron en O Gatañal.

Ficha técnica:

Frigoríficos del Morrazo: Hermones, Simes, Krook, Castro, Cerqueira (4), Pousada (2) , David García (2) -siete inicial- Milosevic (3), Suso Soliño (7,3p), Potic (6) Rubén Soliño (3), Muratovic (4), Casares y Salazar (ps).

Bada Huesca: Gómez de Lite, Carmona (2), Marcelo, Val (2), Eloy Félez (4), Teixeira (4) y Oier García (5)-siete inicial- Arguillas (ps), Carro (1), Mira, Todorovic (2), Mikel, Fran Ariño (5) y Bonanno (1).

Marcador cada cinco minutos: 3-2, 6-3, 8-8, 11-8, 14-12, 16-14 (descanso); 18-16, 20-18, 23-20, 26-22, 28-23 y 31-26.

Árbitros: Álvarez Menéndez y Friera Cabado. Excluyeron a Cerqueira, Castro y Krook por parte del Frigoríficos del Morrazo, y a Carro (2), Mira y Oier García por parte del Huesca.

Incidencias: Unos 1.500 espectadores en el pabellón de O Gatañal.