La falta de acierto en el lanzamiento condenó al Frigoríficos del Morrazo a la derrota ante el Puerto Sagunto (27-23) en un choque en el que, sin embargo, las sensaciones ofrecidas por los cangueses fueron más positivas de lo que reflejó el marcador. La sequía anotadora sufrida tras el paso por vestuarios -los de Pillo anotaron solamente dos goles en los primeros 14 minutos- fue un lastre demasiado pesado para un equipo que tampoco contó con la aportación realizadora de sus lanzadores, Potic y Milosevic, que ayer no se estrenaron.

El Cangas arrancó el partido exhibiendo una buena defensa y sin notar la ausencia de Serafín, uno de los habituales en el 6.0. En ataque, aunque la circulación de balón era buena faltaba acierto en el tiro, lo que permitía que fuesen los locales quienes mandasen con mínimas rentas en el electrónico. Las complicaciones llegarían poco después, con los problemas en el hombro de Nikola Milosevic, que obligaron a Pillo a prescindir de sus servicios el resto del encuentro. Además, tuvo que alinear a Dani Gómez y realizar tres cambios defensa/ataque. Así, al descanso la ventaja para los levantinos era de tres goles.

Lo peor llegó en la reanudación. Sin el lanzamiento exterior de Milosevic y de Potic y ante una defensa tan cerrada como la saguntina, el Frigoríficos sufrió mucho en ataque. Tanto como para secarse por completo y anotar solo dos goles en 14 minutos. El parcial de 6-2 parecía dejar sentenciado el choque. Bruixola tapaba bien a los extremos y ni las tres inferioridades que vivió el equipo de Nikola Milos permitieron al Cangas romper la dinámica. Pillo pedía tiempo (minuto 42, 19-13). Los valencianos marcaron su máxima diferencia (20-13) y el Frigoríficos comenzó a remontar.

El técnico visitante cambió el 6.0 a un 5.1 más agresivo que cortocircuitó por momentos el ataque del Puerto Sagunto. Rubén presionaba bien las líneas de pase y los robos de balón permitían contragolpear con rapidez (20-16, minuto 46). El cuadro local aguantó las embestidas y Milos reorganizó filas (23-19, minuto 50, con tiempo muerto). No hubo opción a mucho más. El Cangas no le perdía la cara al choque pero no acabó de engancharse. Su primera final de la segunda vuelta salió cruz. Ahora toca prepararse para el choque ante el Puente Genil.