El Cruceiro sumó ayer su séptima victoria consecutiva y sigue escalando posiciones.

Todavía sin tiempo a acostumbrarse al partido, el Caldas se adelantó con un gol de penalti de David. La pena máxima fue muy protestada por el conjunto local.

Poco a poco el Cruceiro superó ese arranque y generó ocasiones. Barreiro pudo igualar en un mano a mano en el que reaccionó tarde. Palmero también la tuvo. El empate llegaría poco antes del descanso por mediación de Barreiro, que recibió un balón entre los centrales y remató cruzado y raso. El Caldas trató de llevar peligro recurriendo a balones largos.

En la segunda parte el Cruceiro fue mejor. Arón y Barreiro se estrellaron con los postes. El gol sería un remate de cabeza de Arón que toca un defensa dentro de la portería. El colegiado concedió gol en propia puerta. En la recta final dos vaselinas que salieron fuera pudieron poner la tranquilidad.