El Domaio sigue ocupando la penúltima posición y la salvación es un objetivo más que complicado. Pero el triunfo in extremis del domingo ante el Valladares abre una nueva ventana de esperanza para los moañeses cuando faltan cinco jornadas para concluir la liga. "Lo primero que hice en el primer entrenamiento de la semana [el martes] fue felicitar a los jugadores. No tanto por la victoria, sino por la actitud demostrada", afirma el entrenador, Manuel Núñez. Ésa es la clave según el entrenador del Domaio, que en los días previos al partido dejó un recado público a la plantilla por la "falta de compromiso y de implicación" de algunos de sus integrantes, aunque no quiso particularizar.

Ese toque de atención parece que en cierta manera ha dado resultado. "Lo que les he dicho es que lo del domingo no se puede quedar en flor de un día, hay que darle continuidad", sostiene Núñez. El técnico se acoge al discurso de "partido a partido" a la hora de analizar el calendario que les resta a los suyos en el tramo final del campeonato y defiende que es necesario sumar al menos 12 de los 15 puntos en juego y mantener la línea mostrada el domingo ante el Valladares. "A lo mejor con eso no nos llega porque sigo pensando que tenemos pie y medio fuera de la categoría, pero mientras las matemáticas nos lo permitan hay que seguir y mantener la ilusión hasta el último momento", afirma el técnico de los moañeses.

El calendario hasta final de liga depara encuentros contra rivales que se hallan en situaciones de lo más diversa. "Este domingo jugamos contra el Areas, que ya no se juega nada porque ya tiene la salvación. Pero en la siguiente jornada recibimos en casa al Céltiga, que puede ascender y los tres puntos para ellos son vitales", sostiene. Los dos siguientes partidos serán lejos de A Granxa, ante Mondariz y Estradense, para acabar la liga en Domaio ante el Caselas.