El Servi-Auto Bueu va camino de convertirse en el "matagigantes" de la competición. Si en la primera vuelta se impuso a domicilio al Chapela, ayer derrotó 34-31 al Calvo Xiria, que llegaba a Bueu como líder y con solo dos derrotas.

Fue un encuentro muy igualado y disputado a velocidad de vértigo. Al Bueu le costó ajustar su defensa y en cuanto lo consiguió, en la segunda parte, logró ponerse por delante en el electrónico. A ese triunfo contribuyeron de manera decisiva sus porteros. Lagoa, después de completar una gran actuación, tuvo que retirarse a diez minutos para el final debido a unos mareos. Su lugar lo ocupó Yeray, que pese a estar lesionado mantuvo el tipo y realizó paradas de mérito para amarrar el triunfo local.