Un Cangas de diez. De matrícula de honor. No hay mejor manera de resumir lo que está haciendo el Frigoríficos esta temporada. El conjunto entrenado por Víctor García "Pillo" sumó ayer su décima victoria consecutiva tras ganar 31-29 a un correoso Benidorm, un triunfo que le aúpa a la tercera plaza de la liga con 20 puntos tras la derrota de Granollers ante Naturhouse (24-29). A falta de dos jornadas para el fin de la primera vuelta los cangueses acarician con la punta de los dedos una histórica clasificación para la Copa Asobal.

El décimo triunfo llegó tras un partido intenso, en el que el Cangas rozó por momentos la perfección y en el que al final supo sufrir para doblegar a los alicantinos. Que el choque iba a ser complicado quedó patente desde los primeros minutos. El lateral David Jiménez se encargó de demostrar con cuatro goles consecutivos, cuatro cañonazos imparables, que el Frigoríficos tenía razones fundadas para temerle. La primera mitad fue muy igualada, jugada a una velocidad casi de vértigo y en la que ninguna de las dos defensas se mostró especialmente acertada.

El Benidorm llegó a ponerse con 9-11 [min.18], que fue inmediatamente respondido por los locales con un parcial de 4-0 para colocarse 13-11 [min.22], guiado por un excelente Alberto Casares, que dirigió y anotó seis goles en una serie sin fallo. Aún así el Frigoríficos no fue capaz de romper el partido en esos instantes finales del primer periodo y al descanso se llegó con un 15-15.

El arranque del segundo tiempo fue sencillamente espectacular, con un Cangas que desarboló a su rival con un juego que rayaba la excelencia. Una defensa profunda, junto a la aportación de Salazar en la portería, y un clarividente Alen Muratovic en ataque impulsaron al Frigoríficos. A pesar de sus 37 años ver jugar al montenegrino es una delicia: su visión de juego, sus asistencias a Cerqueira en el pivote, lujos como el pase por la espalda para que Moisés Simes marcase el 17-16 o sus cuatro goles en el segundo tiempo dan fe. En apenas catorce minutos los de O Morrazo endosaron al Benidorm un parcial de 10-4 para alcanzar una ventaja máxima de seis goles [25-19, min.44 con otro gol de Simes]. No obstante, este Cangas es un equipo en mayúsculas, en el que todos aportan. El de ayer fue un triunfo coral, con la aportación de toda la plantilla y con jugadores como David, Eijo o Casares que pasaron casi toda la segunda parte en el banquillo para no forzar.

Pero el Frigoríficos parece que no sabe ganar si no es con sufrimiento. Después de jugar sus mejores minutos se atragantó con la presionante defensa del Benidorm, que en ataque apostó durante muchos minutos por la táctica de portero-jugador y con un David Cuartero demoledor. Las exclusiones pasaron factura y los de Pillo encajaron un parcial de 0-4 que volvía a meter a los alicantinos en el encuentro [25-23, min.48]. Otra vez la clarividencia de Muratovic, con dos goles consecutivos, volvió a iluminar el camino.

Los últimos diez minutos fueron de sufrimiento y tensión, unos minutos en los que el Cangas volvió a mostrar su grado de madurez para conquistar un nuevo triunfo que hizo las delicias de O Gatañal. El Frigoríficos vive el mejor momento de su historia y se ha gando con creces el derecho a disfrutarlo y a seguir soñando.