Suma y sigue. El Balonmán Cangas-Frigoríficos del Morrazo está completamente desatado. Ayer sumó ante el Go Fit Santander su sexto triunfo consecutivo y cierra un mes de octubre de ensueño, con un pleno de victorias. Los cangueses suman 12 puntos y afrontan el próximo parón de liga en una situación envidiable. Tanto que ahora sí el cuerpo técnico se permitirá el pequeño lujo de empezar a pensar en la eliminatoria de la Copa EHF que el Frigoríficos jugará el 22 y 29 de noviembre ante el CSM Bucarest.

El electrónico de O Gatañal reflejó al final de los 60 minutos de juego un resultado de 30-25, un marcador que llegó a ser de 30-24 a pocos instantes para el final. Pero ese tanteo no refleja como fue en realidad el encuentro, con mucha igualdad, diferencias cortas y no exento de tensión. Un partido que además sirvió para demostrar que el Cangas este año tiene las espaldas más que cubiertas: Yeray Lamariano no tuvo su tarde y mediada la primera parte dejó su sitio en la portería a Edu Salazar, que completó una actuación memorable y consiguió que el público de O Gatañal acabase coreando su nombre.

El Go Fit entró más entonado en el encuentro y gozó de las primeras ventajas en el electrónico, sobre todo gracias al lanzamiento exterior de Lon y Paredes y a los goles de Álex Álvarez. El intercambio de tantos favorecía a los cántabros ante un Cangas que no era capaz de cerrar su defensa y con un Lamariano que no tenía un día inspirado bajo palos. Aun así el portero realizó alguna intervención de mérito, como una parada en un contrataque claro de Jorajuría con un 3-5 en el marcador.

El Cangas hacía la goma en esos primeros minutos, sostenido por la dirección y goles de David y Adrián. Los cangueses no eran capaces de ponerse por delante y en el minuto 16 Víctor García "Pillo" decidió dar entrada a Edu Salazar con un 8-10 en el marcador. Al final del partido contaba el técnico que durante la semana había trabajado con el joven para que estuviese preparado para cuando llegase su ocasión. Esa oportunidad llegó ayer y el chaval no la desaprovechó, con un 40% de efectividad bajo los palos. En el último cuarto de hora del primer tiempo echó el candado a la portería y con la ayuda de la defensa permitió voltear el resultado, que llegó a ser de 15-13. Una acción final de Postigo puso el 15-14 para irse al descanso con todo por decidir para los segundos 30 minutos.

En esa segunda parte las defensas cobraron mayor protagonismo y el Go Fit intentó cortocircuitar la conexión DavidGarcía-Adrián Rosales con sendas defensas mixtas. El equipo de Rodrigo Reñones consiguió equilibrar de nuevo el electrónico de manera momentánea después de un parcial de 0-2 (17-17, minuto 37). A ese parcial respondió el Frigoríficos con otro de 3-0 para lograr un 20-17 en el minuto 39, que era la máxima renta del encuentro hasta ese momento. A pesar de los cambios en defensa del Go Fit el Cangas se las apañó para seguir encontrando el camino del gol con la aparición de otros jugones como Alberto Casares (cuatro goles ayer), Alen Muratovic y Rubén Soliño, que estuvo impecable desde los siete metros con un cuatro de cuatro.

Los cántabros volvieron a acercarse en el marcador (21-20, min.42), pero ya no fueron capaces de volver a igualar el encuentro. La defensa canguesa, la extraordinaria actuación de Salazar y algún que otro gol in extremis, como un golpe franco de Adrián Rosales, mantenían la ventaja del Frigoríficos.

La igualdad se mantuvo hasta el minuto 54, con un 26-24. Un tiempo muerto de Pillo y una buena acción en defensa de Eloy Krook que provocó un fulgurante contragolpe de Muratovic sirvieron para que el Cangas cabalgase sin freno hacia el triunfo. Salazar aún tuvo tiempo de hacer un par de paradas de mérito y detener un siete metros a Álex Álvarez. Los goles finales de Alberto Casares y Suso Soliño completaron la gran fiesta canguesa ante una afición entregada, que aún volvió a celebrar una nueva parada de Salazar a Diego Muñiz sobre la bocina.

Así no es de extrañar que al final del partido Pillo se felicitase por el gran encuentro de los suyos y que al mismo tiempo se lamentase porque el victorioso mes de octubre ya tocaba su fin. Si todos los meses fuesen como éste el Balonmán Cangas no tendría techo.