El Frigoríficos toma la directa. El conjunto cangués ha encadenado su cuarta victoria consecutiva y ya se afianza en la zona media-alta de la tabla clasificatoria después de doblegar a un batallador Bada Huesca en O Gatañal. Atrás quedan las posibles dudas del arranque de competición y por delante un apretado calendario -a la Liga habrá que sumarle la Copa y la Copa EHF- que afrontará en un momento dulce y con la moral por todo lo alto tras lo conseguido en las últimas semanas.

Víctor García, "Pillo", no auguraba ayer un duelo fácil y a fe que no lo fue. El Cangas no tuvo momentos para el lucimiento y sí un partido de lucha en las trincheras, para ir sumando gol a gol en un titánico esfuerzo hacia la victoria en el que, nuevamente, la defensa brilló con luz propia y Yeray Lamariano apareció en momentos determinantes para poner su granito de arena.

El Huesca es un equipo correoso, que a la experiencia de sus hombres en ataque une una defensa pegajosa, que genera muchas dudas. Si a ese cóctel se une un Pejanovic en estado de gracia -once paradas en la primera mitad y un porcentaje global de más del 40 por ciento al final del choque- la misión era complicada para los locales. El Frigoríficos no se encontró cómodo en ningún momento, y mucho menos en un inicio en el que los visitantes marcaron un 1-4 de parcial de salida. Sin embargo, los cangueses fueron entrando poco a poco, ayudados por las tres exclusiones consecutivas sufridas por los de Nolasco. La diferencia se enjugaba y el Cangas tomaba el mando (6-5, minuto 13).

Pero no iba a ser todo tan fácil. Pejanovic taponaba todas las vías hacia su portería y evitaba que se rompiera el marcador. Atrás, los gallegos se mostraban sólidos como siempre. Si la semana pasada lo hacían con un 3.2.1 en ésta era con un 6.0. El resultado, idéntico, con un conjunto rival ahogado y con muchos problemas para marcar. La igualdad era máxima y solo al final David García encontró el espacio para mandar a los suyos a vestuarios con ventaja (12-11).

Mejor en ataque

Poco o nada cambió en la reanudación. Las superioridades apenas influían en un electrónico que ofrecía alternativas (12-13, 14-13). El Frigoríficos explotó un par de contragolpes y desatascó su ataque para adquirir una renta de dos goles (16-14, 18-16) que el Huesca, haciendo la goma, supo equilibrar (18-18 con tiempo muerto de Pillo en el minuto 45).

Los locales insistían con una primera línea de "jugones", con Muratovic acumulando minutos y Casares compartiendo pista con David García. Y la llamada a filas del entrenador local surtía efecto. El Cangas recuperaba su ventaja (20-18) e incluso en inferioridad la ampliaba (22-19, con nuevo tiempo muerto, esta vez del preparador del cuadro visitante, minuto 51).

Lamariano sacaba un penalti a Diógenes y el Cangas resistía en una nueva inferioridad. La tercera exclusión de Cerqueira, con la consiguiente roja, abría las esperanzas para el Huesca, más aún tras el tanto de Cabanas desde los siete metros (23-21). Pero Adrián forzaba los dos minutos de Eloy González y equilibraba fuerzas. Aunque Pejanovic sacaba un nuevo balón al lanzador cangués la jugada era un triunfo moral. Y el de verdad llegaría poco después, cuando Muratovic devolvía la ventaja de tres goles al marcador. El Huesca tiraba la toalla y Moisés y David García redondeaban un marcador que no refleja la igualdad vivida en el encuentro. El Frigoríficos suma su cuarto triunfo seguido y sienta las bases para aspirar a la permanencia.