La novena plaza, con 52 puntos en su casillero, colma las aspiraciones de un Alondras que pasó momentos de dificultad a lo largo de una temporada de transición, marcada por los numerosos cambios en la plantilla. También satisface a un José Curiel que asumió la dirección técnica del equipo cangués en las últimas 12 jornadas y que logró alcanzar el objetivo de la permanencia. "Puede considerarse un éxito. Hemos hecho 20 puntos de 36 posibles, números para estar en los puestos altos. Conseguimos la meta que nos habíamos marcado y tuvimos un final de Liga muy agradable", subraya.

Lo cierto es que a pesar de la holgura clasificatoria, el Alondras no pudo asegurar su salvación hasta la penúltima jornada. "Todo estaba muy apretado y aunque lo máximo que llegamos a estar del descenso fue a cuatro puntos había un riesgo", apunta, antes de añadir que "ese colchón de puntos con el que partimos nos dio cierta tranquilidad". El técnico vigués manifestó estar "contento por la evolución que ha experimentado el equipo. Al final comenzamos a ganar porque la plantilla demostró una importante capacidad de mejora y yo conseguí dar con la gente necesaria". En esa labor tuvo especial relevancia el factor psicológico de recuperar a un equipo que estaba tocado.

Curiel afirma que las 12 jornadas disputadas a sus órdenes, "a pesar de haber estado peleando por no descender, fueron de disfrutar. Y la prueba más evidente es que el último partido fue en el que ofrecimos un mejor juego desde mi llegada". En este último choque, el técnico recurrió a un juvenil como Abel para darle la titularidad, en lo que calificó como "un premio no solo para él sino para todos los juveniles que nos han ayudado esta temporada, jugadores como Jesús, Raúl, Serxio, Berto, Xoel o Iván".

El preparador desveló alguna de sus intenciones con respecto a estos jóvenes. "Serxio es una realidad y estará seguro con nosotros, y Abel es un futbolista interesante al que le falta mucho en el aspecto físico. Le queda un año en la categoría y entrenará con nosotros el año próximo". Sobre Berto manifestó que "debemos estudiar su caso, porque es un futbolista con mucho futuro y muy buenas condiciones, pero no queremos que esté parado un año entero".

A nivel particular, Curiel apunta que "he disfrutado mucho la experiencia en Tercera División. Venía de Atios, de un equipo que estaba lejos de los puestos de ascenso pero también de la zona de peligro, y llegar aquí me hizo volver a enchufarme para pelear por un objetivo claro y debutar en Tercera, que era algo que deseaba". Ahora le tocará ponerse manos a la obra para planificar la próxima temporada, con una plantilla a su medida pero con las restricciones presupuestarias habituales. "No tengo problema en adaptarme a las necesidades del club, e intentaremos plantear objetivos más ambiciosos", afirma el técnico alondrista.