Pase lo que pase hoy en el campo de A Lomba, el Estradense escribirá un nuevo capítulo en su larga historia. Los rojillos han llegado a terreno inexplorado pero no quieren que esta temporada finalice hoy y aquí. Asumido el papel de David, los de Alberto Mariano buscan seguir derribando Goliats. Antes fueron Alondras, Fabril, Villalbés... Una larga lista de ilustres caídos en la que hoy quieren poner un nuevo nombre y quizás en más deslumbrante de todo, el del Arosa.

El partido que dará comienzo a las 21.00 horas será una nueva final para un equipo que lleva jugando encuentros a todo o nada desde febrero y hasta ahora ha salido victorioso en todos. Para la ocasión, Mariano ha vuelto a repetir discurso. Agresividad, concentración, no conceder, descaro y aguardar su momento. Y todo eso, a la mayor velocidad posible. Son cosas aparentemente fáciles pero que el Estradense ha ido puliendo final tras final para dar con una fórmula que funciona.

En esta ocasión, los de A Estrada tendrán sin embargo delante un rival temible. Los de Rafa Sáez están señalados desde el primer partido de esta temporada como uno de los favoritos al ascenso, formando un trío con Arenteiro y Bergantiños. Los dos últimos ascendieron directos y los de Vilagarcía parten como los llamados a hacerlo a través de este play off. Para ello cuentan con una plantilla con muchos jugadores con experiencia en categorías superiores o contrastados en Tercera. A estos hay que sumar que el Arosa ganó los dos partidos entre ambos equipos esta temporada. Fueron duelos igualados en los que mostraron una de sus grandes cualidades, la pegada.

“La urgencia por el ascenso es para ellos. Estamos hablando de un equipo histórico de la categoría y que es uno de los favoritos a subir. Nosotros somos en estos momentos un escollo hacia su objetivo”, afirmó Alberto Mariano, quien otorgó a su rival el papel de favorito y descargó a su equipo de esa presión por la victoria.

En cuanto al partido, Mariano señaló que este tipo de “finales” se suelen decidir por “detalles”, por lo que considera clave la concentración defensiva, especialmente ante un rival que necesita muy poco para hacer daño. Por contra el técnico destacó la facilidad goleadora que su equipo viene mostrando desde comienzos de febrero, con solo un partido, contra el Fabril, en el que se quedaron sin marcar. “A veces estos partidos no los gana el mejor equipo, sino el que mejor esta ese día”, argumentó.

Mariano se mostró también contento de poder contar en este partido con todos sus efectivos, incluido un todavía medio renqueante Brais Calvo. Todos los jugadores han entrado en la convocatoria. “Todos se merecen estar ahí y disfrutar de este partido y de este ambiente. Se lo han ganado”.

Nueva equipación

El Estradense presentó ayer la nueva equipación con la que disputarán este partido. En el choque jugado en liga, los colegiados no les permitieron jugar con ninguna de sus equipaciones, ni la roja ni la blanca, al entender que se confundiría con la del Arosa. Por este motivo, han creado una camiseta especial para la ocasión en negro. Agradecieron para ello la ayuda del delegado de Amura en Galicia, Alberto Rivas.

Polémica con las escasas entradas para el Estradense

La distribución de entradas para este partido ha generado polémica entre ambas aficiones. El Arosa ha cedido al Estradense 120 de las 700 entradas disponibles. El club rojillo las sacó a la venta en la noche del jueves –con gente esperando dos horas antes para conseguirlas– y se vendieron en pocos minutos, dejando a parte de los aficionados que hacían cola sin ellas. Esto hizo que muchos aficionados rojillos buscasen conseguir la entrada a través de las que puso a la venta el Arosa. Algunos lo consiguieron pero fueron muchos los que se quedaron sin ella. Esto terminó con discusiones a través de las redes sociales, con quejas de los aficionados rojillos y réplicas de los arousanos. El presidente del Estradense, Toño Camba, quiso sin embargo calmar los ánimos y agradeció el trato del Arosa, recordando que solo tendrían que haberles dado 40 entradas. Considera sin embargo que el problema viene de las fuertes restricciones impuestas por el Concello, que obligan a reducir en mucho el aforo de A Lomba. Además, lamentó que no se fijase con anterioridad un campo neutral más grande o un reparto de entradas equitativo, cosas que habrían evitado estos problemas.