Christian Costoya ofreció este fin de semana toda una lección de pilotaje durante las WSK Champions Cup disputadas sobre el trazado de Adria, en el Véneto italiano. El nuevo piloto de Parolin supo sobreponerse a todas las adversidades durante las clasificatorias para entrar en la final de la categoría Mini, donde dio muestras de su calidad acariciando el podio. Costoya fue cuarto después de un mano a mano en la última vuelta con el singapurense de IAME, Tiziano Monza.

El joven piloto trasdezano consiguió meterse ayer en la gran final después de protagonizar un total de 151 adelantamientos y siete vueltas rápidas en los días previos a la gran final. Además, en la última eliminatoria anterior a la carrera volvió a ofrecer otra exhibición partiendo desde la última posición para meterse en el Top 10 de la prueba. Después, Christian Costoya acabaría sexto en la prefinal haciendo olvidar el nefasto puesto 113 de la clasificación después de un incidente en la pista de Adria.

Mano a mano

Christian Costoya partió ayer en la final en la sexta fila ocupando la duodécima posición y con todo por decidirse a diez vueltas en el circuito del norte de Italia. El piloto se estrenaba con su nuevo equipo, el Parolin, y lo hizo a lo grande protagonizando intensos mano a mano con todos sus rivales. Costoya sí pudo esta vez librarse de las continuas tarascadas de unos pilotos que venden cara la piel a la hora de dejarse adelantar en este torneo de tanto prestigio. A golpe de vuelta rápida, el de Trasdeza llegó al último giro con opciones de subir al podio en medio de una pelea muy bonita protagonizada con Tiziano Monza. El español y el singapurense se fueron adelantando mutuamente hasta llegar a la recta de meta donde el segundo en paralelo consiguió hacerse con la tercera plaza. Al final, sólo 22 milésimas apartaron al silledense del ansiado podio.

En el seno del equipo Parolin se vivió intensamente la carrera de su nuevo miembro. “No hay piloto que mereciera hoy (por ayer) más una copa que él”, indicaron al término de la prueba. Añadiendo que “no se recuerda a nadie capaz de hacer tantos adelantamientos”.

Costoya permanecerá esta semana en el país transalpino para preparar las WSK Super Master Series que también tendrán lugar en el autódromo de Adria antes de recorrer dos trazados más. La intención del trasdezano es continuar con su adaptación a la nueva montura para poder quitarse la espinita en su próxima cita como nuevo piloto del Parolin Racing Kart.