Importante y trabajada victoria (3-2) la lograda en la tarde de ayer por Inversia A Estrada Futsal ante el Xove. En un partido de nervios y sensaciones, los estradenses encontraron en Moro al hombre encargado de liderar la victoria. El de Benavente apareció, una vez más, en el momento justo. Cuando su equipo naufragaba ante un rival que ganaba 0-2 y con mejores sensaciones, dos acciones suyas en jugadas de estrategia permitieron igualar el partido. A partir de ahí, los locales encontraron su juego habitual para llevarse unos puntos que pueden ser claves en la pelea por la permanencia.

El partido no comenzó como esperaban los de Garabal. El Xove sabía que sus opciones de agarrarse a la Segunda B pasaban en gran parte por sacar algo de A Estrada y firmaron una buena primera parte. Con una gran intensidad en la presión fueron capaces de maniatar a un Inversia superado en muchos momentos y que tuvo que terminar dando por bueno el 0-1 con el que se llegó al descanso. El Xove tuvo muchas ocasiones, especialmente cuando los locales se atrevían a abrir sus líneas. Así llegó el tanto, con un robo en la salida de balón. Los de Garabal dejaron pocas ocasiones, salvo algún aviso de un bien controlado Moro y alguna llegada al ataque de Pablo.

La segunda parte comenzó de la peor manera posible para los locales. Nada más empezar, una nueva contra permitió a los visitantes colocar el 0-2, un resultado que ponía las cosas muy complicadas a los estradenses, muy lejos de su mejor nivel y superados en las disputas.

Cuando el tercero de los visitantes parecía más cerca que el de los locales apareció Moro. El jugador de Benavente solo necesitó un metro de espacio para anotar el primero en la cuenta local en una jugada de estrategia a saque de córner. Solo un minuto después Moro volvió a castigar al Xove. Un saque de banda le dejó de nuevo el margen suficiente para volver a enganchar un disparo que se coló en la meta visitante.

El empate dio alas al Estrada Futsal ante un Xove tocado. En pleno vendaval local llegó el tercero, tras un robo de balón del veterano Marcos Sesar que aprovechó para marcar de disparo raso. Con el partido en ventaja, los de Garabal se replegaron y encontraron contras para sentenciar, especialmente por medio de un Moro que falló dos mano a mano con el meta rival.

En el tramo decisivo, el Xove lo intentó con portero jugador, aunque los locales supieron sacrificarse y sufrir hasta el pitido final para llevarse la victoria.