El pasado miércoles tuvo lugar en la capital de España la primera parte de la Asamblea de la Federación Española de Bádminton con un sabor muy amargo para Rodrigo Sanjurjo. En ella, el mandatario gallego tenía muchas esperanzas de poder regresar a la junta directiva nacional y volver a formar parte del futuro de este deporte en España, pero un revés inesperado de los acontecimientos terminó por dejarlo fuera del organismo. "No voy a definir lo que me hicieron algunos porque el tiempo nos dará al final la razón, pero sí tengo que reconocer que me han dejado tirado como una colilla", asegura Sanjurjo.
El directivo gallego se considera engañado y traicionado, al igual que su homólogo andaluz, por "compañeros de viaje que pensaba que eran mis amigos". Sanjurjo se muestra muy decepcionado por lo sucedido en Madrid después de "comprobar que los interés personales están por encima del bádminton para algunos e incluso de la integridad de las personas". Sanjurjo que ya se ve fuera de la junta directiva por insiste en la "enorme decepción" sufrida el miércoles por personas que hasta entonces consideraba compañeros porque "me han engañado amigos que han estado incluso en mi casa comiendo y todo".
