"Quedan trece finales y tenemos que rascar donde podamos. Nos da igual el rival. Ni Celta ni Dépor. Todo lo que sumemos será clave a la hora de mantenernos en esta categoría", explica el entrenador de la Escola de Fútbol Lalín juvenil, Javi López, al analizar el camino que debe seguir su equipo para mantenerse en Nacional. Los rojinegros son a estas alturas quintos por la cola en una categoría con dos descensos directos y dos más que podrían llegar por arrastres de División de Honor. Todo apunta que finalmente serán tres los descensos, aunque su objetivo será meter a cuatro por debajo a final de temporada para desterrar cualquier duda.

Los problemas en este punto surgen por la igualdad que reina en la parte baja de la clasificación, donde las diferencias son mínimas con tantos partidos todavía por jugar. Los lalinenses cuentan con 18 puntos, solo uno más que el Ourense, a tres del O Val y a cuatro del Villalbés. Por arriba tienen al Val Miñor y al Valladares a dos y cuatro puntos. Entre estos equipos se jugarán las tres plazas del descenso, con el colista Porriño casi sentenciado con once puntos. Los rojinegros tienen por delante varios enfrentamientos directos que serán claves.

La buena noticia para el equipo dirigido por Javi López es que llegan al momento clave de la temporada en su mejor momento. El estreno en la categoría fue duro para los rojinegros. De los primeros doce partidos perdieron nueve, situándose en puestos de descenso directo. Todo cambió a partir de diciembre, con nueve partidos hasta ahora en los que ganaron tres, empataron dos y perdieron cuatro, números que les permitieron escalar posiciones y colocarse fuera del descenso a Gallega.

"En los primeros partidos los resultados no eran reales. Competíamos contra todos pero nos faltaba tener el ritmo de esta categoría", explica Javi López. "La clave estuvo en la intensidad y en no cometer errores. En esta categorías la diferencia está en la áreas. Con un error atrás recoges el balón en la portería y tienes que aprovechar las que tienes", añade al tiempo que destaca una tendencia que se repite en todos los equipos de la escuela. "Somos un equipo muy casero. Durante varios años el Cortizo fue un fortín. Este año ya no lo es porque el salto de categoría se nota pero la mayor parte de los puntos los logramos aquí. Estamos más cómodos en casa".

Javi López destacó el mérito de un equipo formado por jugadores salidos de la cantera que se enfrenta a canteras que de grandes ciudades y que realizan fichajes para reforzarse. "Somos una escuela humilde y estamos peleando con nuestros recursos. Hay rivales con grandes infraestructuras, que tienen muchos jugadores entre los que escoger y que hacen fichajes. Tenemos los pies en el suelo pero vamos a pelear por seguir aquí".