Formado en las categorías inferiores del Callobre, Enrique Arís Touceda, más conocido como Kike, dio el salto al Vea hace seis temporadas. El lateral estradense ha vivido en estos años las diferentes caras de un equipo al que siempre le ha costado estar en el lugar que quizás le pertenece por historia. Esa larga trayectoria de más de setenta años vive sin embargo esta temporada su punto más álgido, con un campeonato de invierno con el que nadie contaba. El recién ascendido ha sabido sin embargo aprovechar la dinámica positiva de la temporada pasada, creando un grupo amplio y comprometido a las órdenes de un técnico curtido en categorías superiores, José Antonio Fernández. La familia creada en la Nogueira ha sabido potenciar sus virtudes al máximo, aventajando en un punto al Belvís y en cuatro al Cogal Rodeiro al finalizar la primera vuelta.
"Estamos haciendo una temporada impresionante. Esperábamos estar entre los diez primeros pero viendo como se están dando las cosas creemos que podemos seguir dando guerra", afirma Kike al analizar la temporada de su equipo hasta el momento. Para el lateral, el secreto está en el ambiente que se respira en el vestuario. "Todos somos una piña y cada uno sabe el sitio que ocupa en el equipo. La mayoría vamos a entrenar. Es raro que falte alguien. Creo que todo es fruto de un trabajo bien hecho". El bloque principal del Vea es el del año pasado. "Solo lo reforzamos un poco, algo necesario cuando subes de categoría. Tenemos veinte fichas y eso es bueno porque hay competencia. Cada día somos entre 16 y 18 entrenando. Eso se nota y te ayuda a competir en todos los partidos".
Tras seis temporadas en el Vea, Kike disfruta viendo la alegría que el club. "Después de varios años quedándonos a las puertas del ascenso a Segunda, lograr subir y continuar al año siguiente en una buena dinámica es algo que se nota en el club. Viene mucha más gente al campo". El capitán espera poder dar continuidad a esta buena racha en una categoría que hasta el momento le está sorprendiendo. "Esperaba que los favoritos estuviesen más arriba a estas alturas. Equipos como el Belvís, el Villestro o el Estradense B deberían estar más despegados del resto pero por el momento todo está muy parejo. Puedes perder o ganar en cualquier campo", argumentó.
Precisamente, el campo de la Nogueira es una de las características que marcan a este Vea, ya que es, junto al del Fátima, el único de tierra en la categoría. "Ahora todo el mundo está acostumbrado a jugar en sintético o natural pero nuestro campo tampoco está tan mal. Lo cuidan mucho y lo tienen en buenas condiciones. Incluso el día del temporada estaba perfecto para jugar. Creo que el campo no tiene queja", explica Kike. "Entrenando todos los días allí estás más acostumbrado y conoces mejor el bote del balón. Eso es algo que te beneficia un poco", reconoce al analizar su influencia.
Mirando hacia el futuro, Kike considera que el Vea está capacitado para luchar por todo. "El que nos quiera sacar de ahí va a tener que pelear mucho", explica. "Visto donde estamos debemos ser realistas e intentar seguir ahí. Por lo menos pelearemos por meternos en la promoción de ascenso".
A nivel personal Kike admite que los jóvenes llegados al equipo están poniendo las cosas complicadas a los más veteranos como él. "Lo que toca es ponerle las cosas difíciles al entrenador. No soy de los que más minutos tiene pero la competencia el grande. Como decía, hay mucha competencia y el que está mejor es el que juega. Eso hay que respetarlo. Lo que me toca es estar preparado lo mejor posible para cuando me llegue la oportunidad".
