El estradense Cristóbal Dios subió al segundo peldaño del podio en el Azores Triathlon, una competición celebrada en la jornada de ayer en las islas portuguesas. El triatleta acudía a esta cita internacional con la intención de dejar atrás las malas sensaciones del Triatlón de Gran Canaria y terminó firmando una gran actuación. Solo el triatleta inglés Tom Davis fue capaz de superar al estradense, mientras que el polaco Marcin Lawicki, ocupó el tercer peldaño del podio en las Azores.

"Me quité un peso de encima", reconoció el estradense desde las Azores solo unos minutos después de subir al podio. Dios llegaba a esta cita con buenas sensaciones en los entrenamientos pero con dos carreras, las de Gran Canaria y Sevilla, en las que no había encontrado su mejor nivel. Esta vez sin embargo, todo cambió. En un triatlón internacional y con corredores de gran prestigio entre los diez primeros, el estradense se hizo fuerte con un gran sector de bicicleta para llevarse un segundo puesto de gran mérito.

La competición tuvo un dominador claro, el inglés Tom Davis, quien abrió brecha rápido por delante. Entre los demás hubo más igualdad. El estradense salió del agua en la sexta posición. A partir de ahí le tocó remontar, especialmente en un tramo de bicicleta que le sirvió para adelantar varias posiciones. El primer objetivo fue dar caza a un grupo de tres corredores. Tras hacerlo puso un ritmo fuerte para dejarlos atrás. Antes de iniciar la carreta a pié dio caza al segundo, un sueco. "Sabía que era más rápido que él corriendo así que me limité a mantener mi ritmo y lo terminé descolgando", explicó el estradense. A partir de ahí y sin posibilidad de pelear por la victoria, le tocó mantener distancia sobre sus dos perseguidores.

"Es un resultado que te da prestigio y que ayuda a subir la moral", manifestó Dios, quien se mostró satisfecho del resultado final a pesar de los problemas que tuvo que afrontar, como la humedad asfixiante en carrera o la rotura de dos tornillos del manillar de su bici en los días previos que a punto estuvieron de impedirle correr.