El Estudiantil encajó ayer una clara goleada (10-0) en su visita al campo del Atlético Coruña Montañeros. El encuentro estuvo condicionado por los problemas de efectivos del equipo estradense, que finalmente solo pudo contar con diez jugadores, entre ellos dos porteros. Desde el descanso lo hicieron además con nueve al tener que sacar del campo a Santi Solar en el descanso por una indisposición que venía arrastrando desde días anteriores.

En este marco, los de Agustín Raña salieron al campo sabiendo que tendrían muy difícil sacar algo positivo de esta complicada salida, especialmente por la baja de última hora de Mamadou por problemas laborales que les impidió juntar un once, pero con la intención de vender lo más cara posible la derrota. Sus intenciones se vieron truncadas sin embargo muy rápido, ya que el Montañeros tardó solo ocho minutos en abrir el marcador. Con el 2-0 en el minuto 20 se abrió el festival de goles del conjunto local, que llegó al descanso con un 6-0 y que no bajó el ritmo en la segunda parte.