"Gisele" recibió ayer en la capital dezana a los primeros invitados al Rali do Cocido, prueba que este año se estrena en el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto. Mientras el amplio despliegue de voluntarios de la Escudería Lalín-Deza trabaja contra el reloj para intentar tener todo listo para la jornada de mañana, los pilotos analizaban ayer un trazado conocido a la perfección por los pilotos locales pero nuevo en este Nacional. La sensación de unos y otros es sin embargo la misma, será un rallye duro, como suele ser el lalinense, y marcado por las malas condiciones climatológicas y la suciedad de algunos puntos del trazado.
El goteo de visitantes fue constante en la jornada de ayer y continuará en el día de hoy, el segundo y último de reconocimiento del recorrido. Será además un día para abrir oficialmente las puertas del Rali do Cocido. Lo harán literalmente las de las instalaciones de la Semana Verde de Silleda, en donde se instalará el parque de trabajo. La entrada de asistencias al parque podrá realizarse desde las diez de la mañana hasta las diez de la noche pero es por la tarde, de 17.00 a 22.00 horas, cuando los participantes tendrán que pasar las necesarias verificaciones técnicas, en este caso en el Centro Comecial Pontiñas.
Tras acomodarse y cumplir con los requisitos técnicos, los participantes iniciarán mañana la competición. Será temprano, a partir de las 10.00 horas, cuando los motores comenzarán a rugir en Soutolongo para el Shakedown. Será un punto de partida especial para muchos, el inicio de la primera carrera de un Nacional de rallyes en la comarca dezana.