El Estradense es el primer líder de la temporada en la Preferente Autonómica Sur gracias a su contundente victoria por 5-0 ante el recién ascendido Ribeiro. A pesar de este resultado y de esta posición inicial, su entrenador, Alberto Mariano, pidió cautela y señaló que esta victoria "No es indicativa de nada". "No podemos cegarnos por un buen resultado ante el Ribeiro", explicó al tiempo que recordó el duro compromiso que tendrán el próximo fin de semana en el principal favorito al ascenso, el Ourense, como una prueba para saber su estado de forma real. "Es el equipo referencia en la categoría. Debemos ir con humildad y ilusión".

Para el entrenador, que debutaba en competición oficial en el banquillo del Estradense, el choque ante el Ribeiro siguió el guión aguardado. "Ellos salieron muy replegados, buscando las contras, pero estuvimos muy atentos en todo momento. Nosotros tuvimos el control del balón y estuvimos razonablemente bien con él. Las ocasiones de gol fueron todas para nosotros", manifestó.

El entrenador compostelano saca lecturas positivas de este partido. Una de las cosas que más le gustaron fue la intensidad que mostró su equipo en todas las acciones, especialmente a la hora de pelear por recuperar el balón tras perderlo. "Antes del partido les dije que teníamos que conseguir que los aficionados se fuesen del campo con la sensación que somos un equipo que trabaja. Creo que los chavales entendieron el mensaje y lo hicieron muy bien", afirmó.

Otro de los puntos positivos para Mariano fue la tranquilidad que aportaron jugadores como Javicho o Pignol en un equipo muy joven. "Su veteranía es importante a la hora de sacar el balón con calma o de corregir a los compañeros", afirmó. "Los chavales tenían muchas ganas de agradar y eso hace que a veces estén un poco precipitados. No me preocupa. Si corren de más es algo que se puede corregir. Si corren de menos no", explicó en el mismo sentido.

Mariano inició la semana de entrenamientos pendiente del estado de Santi y Jorge, a quienes espera recuperar. El capitán Manuti todavía tiene en torno a cuatro semanas más de baja.