El Estadio Nacional do Jamor fue el escenario el pasado fin de semana de la final de la Taça de Portugal femenina, un partido que con más de 12.000 aficionados en las gradas batió todo los récords de asistencia a un partido de fútbol femenino. En dicho encuentro hubo protagonismo gallego, ya que en el Braga estaban las cinco jugadoras que llegaron al equipo luso procedentes de El Olivo, aunque su aportación fue diferente en cada caso.

Al final, las exolivas no pudieron llevarse el premio de levantar el trofeo. Perdieron en la prórroga por 1-2, pese a adelantarse en el marcador con un gol de Vanessa Marques en el minuto 12. Clo, Nati, Pauleta, Andrea Mirón y Carla González cierran así su primer año en la liga portuguesa sin ningún título, pero luchando siempre por los primeros puestos y plantando cara al Sporting de Lisboa, ganador del título liguero y de la Copa.

"En la final de la Taça no había ningún favorito. Es cierto que el Sporting ganó el campeonato pero nosotras estuvimos a su nivel o incluso por encima de ellas, ya que tuvimos la mejor defensa y el mejor ataque del campeonato en cuanto a goles sufridos y anotados", indica redondelana Paula Domínguez, Pauleta.

En la final del domingo, en el estadio de Jamor, Pauleta indica que "salimos muy bien al partido y al marcar el gol vimos que éramos capaces de conseguir el título". Algo que finalmente, tras la prórroga no pudo ser ya que el Sporting de Lisboa forzó la prórroga con un gol de Diana Silva en el min. 58, sentenciando Capeta en el 105.

Pauleta recuerda que el ambiente vivido en el estadio fue "increíble". "Había más de 12.000 personas viendo nuestro partido. Que viajaran tantos aficionados desde Braga fue muy gratificante. Sientes que estás haciendo bien tu trabajo cuando te siguen tantas personas. Las jugadoras que ya habían vivido una final nos contaban como era pero nosotras no nos hicimos una idea hasta que lo vivimos el domingo".

Pese a la derrota, Pauleta califica la experiencia como un gran aprendizaje. "Yo siempre digo que se aprende más en la derrota que en la victoria. Nos enseña que el fútbol muchas veces es injusto (sin quitarle ningún mérito al Sporting), y que tenemos que levantarnos siempre, porque el deporte siempre te da nuevas oportunidades".

Durante la final de la Taça de Portugal, las aportación de las cinco exolivas fue muy dispar. Pauleta jugó los 90 minutos, mientras que "Andrea fue sustituida en la segunda parte por lesión". Clo no llegó a jugar y Nati entró en el terreno de juego en el min. 70. Por su parte, Carla sigue lesionada.

Pese a perder esta final, y ceder también la primera posición en la liga regular, donde fueron líderes varias jornadas, el balance es positivo para Pauleta. "A pesar de no haber conseguido ninguno de los dos títulos y quedarnos a las puertas el balance es positivo. Todas las jugadoras, incluyendo las españolas, hemos crecido profesionalmente y personalmente. Vivir así el fútbol es sacrificado, pero te aporta muchas cosas, muchos valores que en la vida son importantes", añade.

"El equipo era totalmente nuevo, y a medida que avanzó la temporada se notó cómo nos fuimos acoplando cada vez más. Llegamos al final de temporada a un nivel muy bueno y eso se vio reflejado en el juego y en los goles anotados", explica la redondelana, que valora el apoyo del presidente del Braga tras la derrota en la final del pasado domingo: "Cuando trabajas respaldada por un club que te apoya te sientes orgullosa de todo tu trabajo".