El Clínica Deza Balonmán Lalín finalizó su participación en el sector nacional cadete disputado en el Lalín Arena con tres derrotas. Las bajas lastraron a un equipo que sin embargo logró ganarse el aplauso de la afición local por el coraje que mostró ante rivales de gran entidad. Para su entrenador, Diogo, la lectura de este torneo es positiva.

"Sabíamos que con las bajas iba a ser complicado pero el grupo estuvo muy comprometido. Conseguimos vaciarnos y dimos un paso adelante como equipo. Debemos quedarnos con el trabajo de los chavales, ya que muchos de ellos dieron un paso adelante con gran determinación. Nuestra actitud fue perfecta en todo momento y la gente nos felicitó por ello", argumentó al tiempo que destacó la importancia de estar en este campeonato.

La cantera rojinegra seguirá ahora trabajando con la vista puesta en el campus que están organizando en junio con la presencia de Pablo y Cecilia Cacheda, entre otras sorpresas.