Victoria y susto para el joven piloto silledense Christian Costoya durante la última prueba del Gallego de karting que el pasado fin de semana se disputó en el remozado circuito de O Choqueiro, en la localidad ourensana de Viduedo, un trazado diseñado en principio para las carreras de autocross que ahora se ha asfaltado debidamente. Christian volvió a demostrar que es el mejor de los alevines gallegos, pero se tuvo que rehacer del disgusto de ver a su padre, Marcos Costoya, partir hacia el hospital después de ser atropellado durante la carrera. Christian Costoya, que se le escapó la pole en favor de Álex Cagiao, terminó imponiéndose en las dos carreras haciendo de tripas corazón mientras su progenitor permanecía en un hospital ourensano para ser tratado de sus heridas.
A pesar de su corta edad, Christian Costoya supo sobreponerse y dedicarle la victoria a su accidentado padre al término de la prueba. Marcos Costoya resultó volteado por un karting X-30 en plena zona de boxes mientras se disputaba la carrera. Costoya salió disparado y en la caída sufrió un fuerte golpe en la cabeza. La carrera estuvo a punto de suspenderse, pero todo el equipo NWK Racing decidió seguir adelante en homenaje a su jefe, ofreciéndole tanto la victoria de su hijo como la de Alberto Varela en la categoría X-30. Cabe destacar que Christian Costoya marcó la vuelta rápida del circuito de Viduedo a medida que pasaban las horas pendiente del estado de salud de su padre Marcos Costoya.
Sin secuelas
Una vez ingresado en una céntrica clínica de la Cidade das Burgas, Marcos Costoya fue sometido a varias pruebas para comprobar su estado de salud después de haber evidenciado pérdidas de memoria desde su ingreso. Finalmente, ayer era dado de alta por los médicos del sanitario ourensano y pudo regresar a Silleda sin más contratiempos. Al parecer, Marcos Costoya no tiene secuela alguna del accidente sufrido en Viduedo, salvo los rasguños provocados por la aparatosa caída sobre el asfalto.
