El Club Deportivo Lalín visita esta tarde el campo del Ourense, donde a partir de las 17.00 horas, intentará hacerse con unos 3 puntos que valen su peso en oro. "Dependemos del estado anímico y tengo miedo que alguna cosa extradeportiva porque estamos aún tocados de la semana pasada", afirmó ayer Tamayo, el entrenador de los del Cortizo. El técnico quiere que sus jugadores se olviden lo antes posible de la accidentada derrota en casa ante el O Grove, y para ello ansía que los suyos "estén tranquilos, sobre todo, en el primer tramo del partido". En este sentido, Tamayo espera a un Lalín "fuerte y con las ideas claras" para poder sumar y tener más cerca la permanencia. Para ello, apela a que esta semana "hablamos mucho y entrenamos muy bien".

En la expedición rojinegra a la Ciudad de As Burgas no estarán los lesionados Meji y Yemba, ni tampoco los sancionados Suso y Brais. La lista está formada por Michi, Luis, César, Reboredo, Mario, Albertito, Cañón, Maceiro, Ayaso, Carra, Beni, Diogo, Óscar Méndez, Manu Rego, Ringo y Guille. "Espero que el equipo vaya leyendo bien el partido conforme vayan transcurriendo los minutos", apostilló un Tamayo que no duda de calificar como "complicado" el compromiso de esta tarde ante los ourensanistas, un equipo que también se tomará lo de esta tarde como "una final porque tienen que asegurar la permanencia", explicó el entrenador de los lalinistas.

Por lo que respecta al rival, Tamayo recordaba ayer que "ellos defienden muy ordenados, y hacen mucho daño en ataque a la contra porque son rápidos, con gente como Bruno y Brais". De todas formas, el técnico rojinegro espera que la importante baja de Guadir sea determinante en el rendimiento del Ourense durante el choque. Por todo ello, Tamayo espera que hoy se pueda ver un Lalín competitivo en todas las fases del encuentro y conseguir una victoria que volvería a colocar a los dezanos en disposición de ascender en la tabla.