"Tenemos entre ceja y ceja ganar a Xiria, Luceros y Chapela, que nos derrotaron en la primera vuelta en partidos que fueron siempre ganables". Así de claro lo tiene Paco Aguiar, entrenador del Lalinense, en este tramo decisivo de la temporada. Y es que al cuadro del Arena sólo le vale ganar el sábado en Chapela para, por fin, culminar el asalto definitivo a los puestos de la fase. "Esperemos completar la faena ganando al Chapela en su casa porque si lo hacemos la Liga se pondrá interesante", manifestó ayer un Paco Aguiar que siempre ha confiado en las posibilidades de los suyos para hacerse con alguno de los dos primeros puestos de la clasificación provisional. Por el contrario, el técnico lalinista también reconoció que "si no ganamos, será un buen palo para nosotros".

El Lalinense, cuarto clasificado, jugará el sábado en la pista del líder, una vigésima jornada que también presenta el duelo entre segundo y tercero, Calvo Xiria y Acanor Atlético Novás. De ganar en Chapela, los del Arena podrán aprovecharse del resultado del duelo del Pabellón Escolar para auparse incluso a la tercer posición, a la espera de lo que pueda pasar en los enfrentamientos que todavía restan entre los tres primeros clasificados. "La victoria nos daría una inyección de moral muy grande", asegura Paco Aguiar, consciente de lo mucho que se juega el Lalinense este sábado. Lo bueno del cuadro de Lalín es que tanto su cuerpo técnico como el vestuario saben que "somos capaces de todo", como demostraron haciendo saltar la banca en Carballo convirtiéndose en el único conjunto del campeonato capaz de tumbar al Xiria delante de su caliente afición. Por eso Aguiar valora mucho la capacidad de reacción del equipo tras haber sufrido las dolorosas derrota del inicio liguero, que dejaron muy tocado anímicamente a todo el plantel. "Nos estamos recuperando del mazazo", explica Aguiar sobre los encuentros perdidos de manera injusta contra los que ahora se están jugando los garbanzos en los puestos de privilegio de la tabla. Repetir lo de los dos últimos sábados es, por lo tanto, la principal misión de los rojinegros este sábado en su vista al feudo del Chapela.

Tocados

En cuanto a la enfermería rojinegra, Paco Aguiar inicia la semana con al menos dos hombres tocados en el vestuario. El entrenador lalinista estará muy pendiente de la evolución de Aser y de Pachi, de los que espera que lo suyo "no sea nada" para pode disponer de ambos en el trascendental duelo de este fin de semana. Otro que sigue entre algodones es Martín Losón, que también es duda para el choque, a la espera del diagnóstico médico pertinente. El entrenador de los de Lalín confía en poder contar con la mayoría de sus efectivos para afrontar con garantías el complicado compromiso de intentar a asaltar la casa del líder provisional.