El piloto de la Escudería Lalín-Deza, Luis Vilariño, se adjudicó ayer el XIX Rali do Cocido al volante de su EVO X y en compañía de su copiloto Ramón López. El lucense venció tras algo más de una hora en una carrera que estuvo marcada por el abandono de Pedro y Marcos Burgo cuando dominaban de manera incontestable la prueba. El Focus RS 05 WRC de los de la Escudería Miño-Lugo rompió su sistema hidráulico en la primera pasada por el tramo de Testa do Monte, y cuando Burgo encabezaba la clasificación provisional con más de 49 segundos de ventaja sobre Vilariño. La segunda plaza fue para otro integrante de la escudería organizadora, Iván Ares, que terminó a poco más de un minuto del ganador final a los mandos de su flamante Porsche 911 GT3. Tercero fue otro coche de la marca de Stuttgart, el de Sergio Vallejo, a 2:42 de Luis Vilariño.

Tras la disputa del testimonial tramo espectáculo de la primera jornada, el de ayer fue un día marcado por la climatología para los participantes del Rali do Cocido'13. El anuncio de lluvia se cumplió desde primera hora de la mañana, una mala noticia para los dos Porsche inscritos en la carrera dezana. La fiabilidad del Focus WRC de Pedro Burgo quedó manifiesta desde el primer tramo de la carrera. El piloto de Miño-Lugo ejerció de líder de la prueba marcando scratch en los cuatro primeros tramos del día. En O Couto, le sacó 15 segundos a Vilariño; en Rodeiro, un minuto al de Lalín-Deza; en O Muiño, 5 segundos más al vencedor final; y en la segunda pasada por Couto ganó con más de 7 segundos sobre Ares y Vilariño.

Sin embargo, el EVO X de Vilariño fue el más rápido en Rodeiro por delante de Ares y Burgo, en lo que empezaba a ser una remontada para el lucense de la escudería organizadora. Burgo volvió a dominar en la segunda pasada por O Muiño, seguido de Vilariño y Vallejo, así como en la primera por Saborida por delante de Ares y Vilariño.

La carrera dezana tuvo su punto de inflexión en el primer paso por Testa do Monte. El WRC de Burgo rompió su sistema hidráulico dejando fuera de combate al lucense. Ares hizo scratch por delante de Vilariño y con Vallejo en tercera posición. Los dos últimos tramos del Rali do Cocido fueron un toma y daca entre los dos pilotos de Lalín-Deza. Ares se impuso en la segunda pasada por Saborida, mientras que Vilariño se adjudicó el definitivo de Testa do Monte, a pesar de los problemas mecánicos de su EVO X.

La organización del Rali do Cocido cifró en unas 3.000 personas más que el año pasado la afluencia de público presente en las cunetas, y valoró positivamente su comportamiento en una carrera que transcurrió sin ningún incidente reseñable.