El Reale EDM A Estrada se quedó ayer con la miel en los labios tras su partido correspondiente a la jornada 18 disputado en la pista del Club Baloncesto Tui. Los de David González sucumbieron por un ajustado 61-59 en un partido donde fueron de menos a más tras iniciarlo descentrados en todas sus líneas. Samuel, con 21 puntos, el máximo anotador de un Reale al que penalizaron demasiado los tudenses durante el primer cuarto, en el que los de casa llegaron a contar con ventajas de 11 puntos, lo que obligó al cuadro rojilo a un sobreesfuerzo antes del descanso. Al final del segundo cuarto, los del Coto Ferreiro consiguieron reducir la distancia a sólo cuatro puntos, resultado con el que se llegó al recreo.

El desgaste de los dos primeros cuartos pasó factura a un Reale que, sin embargo, al término del tercer cuarto vencía por un sólo punto. La igualdad regresó a la pista tudense en el último cuarto de la contienda donde el Tui supo manejarse mejor en el toma y daca que se convirtió la contienda. El Reale jugó con Chaiti, Marcos, Tito (9), Pepe (2), Andrés (8) -quinteto inicial-, Bilba (10), Samuel (21), Lucas (7), Tejo (2), Carra y Don. Los parciales del encuentro jugado en Tui fueron los siguientes: 19-12; 31-27; 36-37 y 61-59.

Por lo que respecta a la valoración realizada por el técnico visitante al término del encuentro, David González aseguró estar "contento" con el partido de los suyos en el Baixo Miño. "Competimos bien, pero ahora tenemos que aprender a hacerlo en partidos como éste, de mucha mano y menos bote", indicó el técnico rojillo al final de la contienda.

González lamentó que, al final, la suerte no sonriera a los suyos en un final de partido "a cara y cruz". En este sentido, el entrenador del Reale también señaló que el partido fue "como me había esperado: Muy igualado y yo creo que pagamos muy caro el esfuerzo de tener que ir a remolque después de que nos pillaran al inicio del partido".