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BALONCESTO - EncestaRías

El Obradoiro conquista su primer EncestaRías

Un gran Leo Westermann guía a los gallegos en la final del torneo de Vilagarcía

Marcus Paige, en el centro, defendido por Shannon Evans (izqda.) y Amar Sylla, en la final del EncestaRías. | // PABLO HERNÁNDEZ

Monbus Obradoiro y Coosur Betis disputaron anoche la final del séptimo torneo de baloncesto EncestaRías. Fue un partido intenso y emocionante, que terminó llevándose el conjunto gallego, por 85 a 78. Su mayor fondo de armario y versatilidad de juego, y el concurso de un extraordinario Leo Westermann decantaron un encuentro que estuvo siempre del lado del Obradoiro, pero al que el Betis no renunció en ningún momento, hasta el extremo de que a falta de 15 segundos la ventaja de los de Moncho Fernández era de solo tres puntos.

El Obradoiro empezó la final muy enchufado, con un Rubén Guerrero que dominaba la pintura y un inspirado Marcos Paige desde media distancia. Los gallegos llegaron con ocho puntos de ventaja al final del primer cuarto. En la continuación, sin embargo, los béticos recortaron distancias gracias al acierto de Shannon Evans y las imprecisiones del Obradoiro en el pase. Pese a todo, los compostelanos lograron mantener una mínima renta de dos puntos al descanso.

Aficionados con bufandas del Obradoiro. | // PABLO HERNÁNDEZ

Tras la reanudación, se mantuvo un guion similar, con un Obradoiro que logró despegarse en el marcador empujado por el base Leo Westermann, que mantuvo durante unos minutos un vibrante duelo con Evans. Sin embargo, los francotiradores Jeremiah Hill y Dairis Bertans lograron mantener con vida al Betis a base de triples.

Alen Pjanic, junto a uno de los organizadores, Diego Doval. | // P.H.

El cuarto definitivo empezó con 59-53 a favor del Obradoiro. Los compostelanos pisaron el acelerador gracias a un par de triples consecutivos de Dragan Bender, el exjugador de Maccabi y número 4 en el draft de la NBA, Álvaro Muñoz y Walker. El acierto desde la línea de 6,75 y la intensidad defensiva hicieron que el Monbus gozase de una cómoda renta a falta de seis minutos. No obstante, el Obradoiro no fue capaz de matar el partido.

Los gallegos entraron en un agujero negro que los andaluces aprovecharon con un par de triples de Eulis Báez, que metieron el miedo en el cuerpo al Obradoiro y a la legión de seguidores que les apoyaba desde la grada. Fue entonces cuando emergió en toda su plenitud la figura de Leo Westermann.

El base francés, ex del Barcelona y del Mónaco, llegó a Santiago para ser uno de los líderes de este Obradoiro, y anoche lo fue. En Fontecarmoa, Westermann fue el corazón y la cabeza del Obra, el que con su templanza y acierto en el tiro en los momentos decisivos evitó el tiro en el pie. Finalizó el partido con números de superclase (22 puntos y 28 de valoración). El pívot Blazevic hizo 11. La estrella del Betis, Evans, firmó 16 puntos.

Un momento del partido por el tercer y cuarto puesto, entre el Oldendurg y el UCAM Murcia PABLO HERNANDEZ GAMARRA

Al final, victoria merecida para el Obradoiro, y éxtasis del público en la “caldeira” de Fontecarmoa.

En el partido por el tercer y cuarto puesto, el EWE Baskets Oldenburg alemán se impuso con solvencia al UCAM Murcia (83-65). Los germanos fueron por delante en el marcador durante todo el encuentro, y aunque los murcianos trataron de agarrarse al partido y llegaron al descanso solo cinco puntos abajo, en ningún momento dieron la impresión de ser capaces de darle la vuelta al marcador.

Otro de los alicientes de la tarde fue el concurso de triples, en el que midieron su puntería un tirador por club. El vencedor fue Alen Pjanic, del Oldenburg alemán, tras derrotar en la final al bético Dairis Bertans.

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