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Fútbol - 2ª RFEF
Rafa Sáez Director Deportivo del Arosa

“Hacer un mejor equipo con el mismo presupuesto se me antoja imposible”

El arquitecto de la plantilla apunta que “muchos firmaron por debajo de su caché”

Sáez deja la incógnita sobre su continuidad para la directiva. INAKI ABELLA DIEGUEZ

El primer episodio de la historia del Arosa en 2ª RFEF ha tocado a su fin. Fue tan corto como intenso y toca hacer análisis para emprender cuanto antes el camino de regreso a la categoría perdida. Una de las voces autorizadas para reflexionar sobre lo sucedido es la de Rafa Sáez, quien fue el encargado de pergeñar una plantilla que literalmente tuvo opciones de salvación hasta el último minuto del curso.

– Nada iba tan mal en el mes de enero ¿A qué atribuye la cuesta abajo del equipo?

– Teníamos 21 puntos que era una puntuación con una proyección correcta. La primera vuelta iba sobre lo previsto teniendo en cuenta que la competición era muy exigente con 6 posibles descensos. El Arosa estuvo en quinielas de permanencia, pero la segunda vuelta nos ha penalizado muchísimo. Los 48 goles encajados es una cantidad tremenda. Empezamos a encajar con relativa facilidad y a ello se unió que en el aporte ofensivo fallaron goleadores a la cita. Nos faltó gol para equilibrar una balanza con mucho peso por un lado. Nos ha penalizado mucho también que hemos sido un equipo que ha empatado muy pocos partidos y el valor de un punto es muy importante. También en lo que supone a nivel de sensaciones.

– Echando la vista atrás, ¿hubiese cambiado alguna de las decisiones tomadas en cuanto al entrenador inicial o a la plantilla?

– Cuando se producen los desenlaces de las competiciones si finalizan con éxito te reafirma en lo hecho, pero si el resultado es negativo indica que en algo se pudo haber hecho otra cosa. Dentro de la situación con la que partimos volvería a hacer lo mismo. Es importante saber que el Arosa puede conformar una plantilla dentro de unas limitaciones presupuestarias. No podemos hipotecar el club y menos sin garantía de éxito final. Han bajado a Tercera equipos que nos doblan en presupuesto económico. Para el Arosa sería un doble castigo hacerlo así y no ser un equipo que el año próximo pueda ser aspirante al ascenso.

– Usted fue el primero en dar un paso a un lado para trabajar en crear estructura. ¿Cuál es su balance en esa línea?

– Si algo positivo va a quedar de la temporada 21/22 es el repunte del sentimiento arosista que se ha visto. Ha sido una semilla importantísima y espero que sea el arranque del siguiente año. La construcción del Arosa está afianzada. Un capital social importante, rejuvenecido y apasionado y ese es el punto de partida. Otra cosa distinta es la economía. El fútbol es una actividad que necesita un soporte económico y el club, con los pasos de la junta directiva, ha demostrado cordura sentido de la realidad. Y el club no puede ir hacia atrás, pero ahora toca ajustar presupuestos.

– Entenderá que muchos miren hacia la dirección deportiva a la hora de depurar responsabilidades.

– Nuestra voluntad siempre ha estado en hacer lo mejor posible. Siempre mediatizados por las condicionantes. Estoy seguro de que con el mismo presupuesto hacer un mejor equipo se me antoja imposible. Muchos jugadores firmaron por el Arosa por debajo de su caché. Han venido al Arosa por la ciudad, el club y la repercusión. También es cierto que partimos con un desconocimiento de la categoría en cuanto a ingresos y demás. En el mercado que nos podemos mover, llegamos tarde a muchos jugadores porque terminamos la temporada anterior muy tarde. Llegamos un mes más tarde a todo respecto a rivales en nuestro mercado, incluso con equipos de Tercera. También a posteriori hubo jugadores que no vinieron, yendo a otros destinos porque nuestra economía era muy limitada a la hora de maniobrar.

– ¿Qué es lo que ha echado de menos en su labor en los despachos?

– Quizá un poquito más de tiempo al principio de temporada. El ascenso nos costó más tiempo que a rivales de nuestro mercado como Bergantiños y Arenteiro. Quizá nos faltó también poder organizar algún partido más relevante en pretemporada. Cuando toca gestionar todo tan rápido tiene su complicación a nivel de conformación de plantilla. También creo que tuvimos un problema muy grande en cuanto a los campos para poder entrenar. Tuvimos muy pocas facilidades en cuanto a medios de trabajo. Son defectos y cuestiones nada facilitadoras que son parte de las limitaciones que tenemos como club. Ningún club de la categoría ha estado como nosotros mendigando campos para poder entrenar por varios concellos de la comarca.

“El apoyo social debe ser un acicate más para el ascenso”

– ¿Rafa Sáez está por la labor de continuar como director deportivo del Arosa?

– Por Rafa Sáez, si mañana mismo me dicen que me tengo que poner las botas para salir a jugar estoy a disposición. En todo lo que pueda ayudar a este club estaré disponible. Pienso en el Arosa 25 horas al día, otra cosa son las realidades a las que nos enfrentamos con el descenso. Estaré a disposición si así lo entiende el club.

– ¿Cuál es esa realidad que espera al Arosa el próximo curso?

– En primer lugar, hay una circunstancia que es un hecho importante para arrancar el nuevo curso. El Arosa ya tiene entrenador que es Luisito y que conoce perfectamente a la plantilla y el tejido del fútbol gallego. Otra cosa distinta es empezar a negociar con jugadores para hacer la plantilla. Eso es un segundo paso, porque el primero es conocer los recursos para poder hacer ese gasto. De todas formas ahora hay muchos más pasos dados que cuando subimos. El verano pasado tuvimos muy poco tiempo y muy poco mercado.

– Lo que está claro es que nadie podría concebir un nuevo proyecto sin el ascenso como meta.

– El Arosa, históricamente, se ha levantado todas las veces que se ha caído. El año que viene tiene que moverse en un planteamiento ambicioso. De retorno a 2ª RFEF por todo, pero sobre todo porque el Arosa es un equipo de 2ª RFEF como mínimo. El año que viene va a ser un equipo aspirante en base a todo lo que es capaz de generar. Además, no concibo que el Arosa pueda empezar la temporada siguiente sin el respaldo social de este año. Es algo que va de la mano de cualquier otro tipo de movimiento del club. Ese apoyo debe ser un acicate más para lograr el ascenso.

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