Así las pruebas disputadas fueron los 60 metros lisos, 500 metros en resistencia, relevos 4x60, salto de longitud, el lanzamiento de peso y de “vortex” que, a modo de dardo de unos 30 centímetros de longitud y 132 gramos de peso, lo hacen idóneo para acercar al escolar al lanzamiento de jabalina.
Cada centro, con sus alumnos equipados con indumentaria propia que les identifica, lucieron sus dotes para sobresalir en cada prueba, poniendo esa dosis de entrega que requería la cita. Eso sí, la prenda que les acompañó en todas las pruebas fue la mascarilla que, siguiendo la pautas de Educación, no pudieron sacarse (únicamente se consentía bajarla un poco en la prueba de resistencia).
Diego Negro, profesor de Educación Física del Colegio Filipense que era uno de los centros participantes, reconocía que “para los niños ha resultado una experiencia fantástica después de estos años de COVID en que no podíamos salir y competir con otros centros”.
“Al acabar -apuntaba- todos me pedían repetir experiencia, volver a competir, pero este ha sido el colofón de la iniciativa diseñada por Xogade, y no estaría nada más que pudiera celebrarse una segunda en primavera”.
Xogade es la plataforma de la Xunta que canaliza el deporte escolar. A través de ella los colegios pueden registrarse para participar en deporte inter-centros, bien a modo de competición como club, o bien de manera lúdica como era ayer, cuyo objetivo era familiarizar a los niños con diferentes pruebas de atletismo adaptadas a la edad.
Diego Negro alienta a los centros a sumarse y registrarse en Xogade para participar en estos eventos escolares, con un amplio abanico que va desde el campo a través a la esgrima, y que va desde los pequeños a alumnos de ESO. “Lo mejor que te llevas -apunta- es la vivencia, te motiva mucho en los meses anteriores para ir preparando la cita”. Y lo recomienda: “Yo llevo 13 años adscrito a Xogade, la verdad que vale la pena y se lo aconsejaría a los profesores de Educación Física”, insiste el docente arousano.
La nueva Educación Física
Las clases de Educación Física hace tiempo que han dejado de ser lo que eran. Van más allá del balón al uso, sino que profesores apuestan para que los alumnos experimenten con deportes que nunca han practicado y cuyas normas desconocen. Entre otros, en los últimos años se ha abierto paso el bádminton, un deporte de iniciación sencilla que, a la postre, idóneo durante el COVID “porque es individual y que, con una red por medio te garantizaba las distancias físicas”, reconocía Negro. Otros que se sueltan con el fútbol gaélico, el floorball o el dathat ball.
