El Arosa se dejó tres puntos en el campo del líder. Un premio que los vilagarcianos tuvieron en su mano tras adelantarse en el marcador en la primera mitad y que tuvieron que ver como se le escapaba entre los dedos en favor de un Unión Adarve que no fue, ni mucho menos, superior a los de Jorge Otero.

Desde un primer momento quedó constancia que las dimensiones del terreno de juego iban a condicionar la puesta en escena. Los de Diego Nogales trataron de meter el miedo en el cuerpo a su rival poniendo el mayor número de balones en el área. Para ello valía incluso un saque de banda. Sin embargo, la mejor oportunidad llegó en una transición por derecha en la que Maganto remató para que Manu Táboas interviniese, pero el rechace cayó a pies de Portero que golpeó forzado ante la oposición de Piay reclamando los locales que el balón superó la línea de gol.

Porrúa intenta un pase ante la oposición de un jugador del Adarve.

Después de ese susto, y ya más acomodado sobre el sintético, el Arosa fue capaz de ir aproximándose a la portería local a base de posesión. Ya se había superado la primera media hora y era cuando los vilagarcianos estaban siendo capaces de llegar con más jugadores a zona ofensiva. En una de esas combinaciones llegó la acción del penalti. Fue con un disparo desde la frontal del área de Mon que dio en el brazo de un defensor y decretó el colegiado andaluz Francisco Javier Expósito. Pedro Beda estrenó el marcador y también su cuenta particular esta temporada con seguridad en su lanzamiento. Un gol que la plantilla dedicó a su entrenador tras perder a su madre horas antes.

La sensación era que el Arosa se estaba encontrando muy cómodo en la casa del líder. Incluso cerca estuvo de producirse el 0-2 con una falta directa botada por Mon que obligó a Christian Parras a meter una mano muy acertadamente en la base del poste derecho de su portería. Pero cuando todo hacía indicar que se llegaría al descanso con ese 0-1, el Unión Adarve empató tras un saque de esquina en el que Dani Ramos se encontró con el balón en el segundo palo para volearlo al fondo de la red de Manu Táboas. Era el minuto 44.

Incluso cerca estuvo de producirse el 0-2 con una falta directa botada por Mon que obligó a Christian Parras a meter una mano muy acertadamente en la base del poste derecho de su portería

Tras el paso por vestuarios, el ritmo de los primeros 45 minutos había descendido considerablemente después de lo que fue un intercambio de golpes muy intenso. Y cuando parecía que no estaba pasando nada se consumó la remontada del Unión Adarve. Fue tras un saque de banda que merodeó la media luna del área y que Montejo acertó a desviar el disparo de Portero desde la frontal del área para mandarlo al fono de la red.

Quedaba todavía por delante media hora en la que el Arosa iba a vender muy cara su piel. Jorge Otero movió el banquillo con la entrada de jugadores ofensivos como Nuño, Diz y Julio Rey y el Unión Adarve, líder de la categoría, se vio obligado a adoptar el papel de sometido buscando gestionar los espacios que resultaran de la arriesgada apuesta de su rival por puntuar. Unas situaciones para sentenciar que los madrileños tuvieron en las botas de Portero y que Manu Táboas resolvió con mucho acierto en el mano a mano con el delantero.

Luismi trata de alcanzar el balón ante la oposición de dos jugadores madrileños.

Pasaban los minutos y el Arosa obligó al Unión Adarve a defenderse exclusivamente, pero la suerte le fue esquiva a los arlequinados que vistieron de azul en el Vicente del Bosque. El mejor ejemplo de esa mañana desafortunada fue el remate que Luis Nuño estrelló en la escuadra de la portería local, para luego botar sobre la línea de gol, cuando ya se cantaba el empate. También Parras se vio obligado a mostrar sus virtudes en un disparo de Julio Rey desde banda izquierda que cerca estuvo de coger al portero adelantado.

El mejor ejemplo de esa mañana desafortunada fue el remate que Luis Nuño estrelló en la escuadra de la portería local, para luego botar sobre la línea de gol, cuando ya se cantaba el empate

La insistencia vilagarciana en busca de evitar la tercera derrota consecutiva se mantuvo hasta el pitido final. Centros y más balones al área fueron una constante, pero sin encontrar el remate definitivo que hiciese justicia a lo que estaba sucediendo en el terreno de juego. Incluso el castigo pudo ser peor de no ser que Táboas estuviese más acertado que Montejo en otra situación de mano a mano.

El pitido final confirmó las amargas sensaciones de un Arosa que demostró personalidad en la visita al líder de la categoría, pero que amplia su serie de tropiezos a tres consecutivos en la sexta jornada.

Ficha del partido:

AD Unión Adarve: Parra; Gallardo, Ramos, Salama, Mayorga; Maganto (Bruno 87´), Calleja (Iker 87´), Cruz (Cidoncha 60´), Nouman (Tellechea 73´); Portero (Albur 73´), Montejo.

Arosa SC: Manu Taboas; Fontán, Campillo (Diego Diz 68´), Ross, Cotilla; Porrúa (Nuño 69´), Pedro García, Alberto Martín, Luismi; Mon (Julio Rey 88´); Pedro Beda.

Goles: 0-1 (37´) Pedro Beda (pen.). 1-1 (44´) Ramos. 2-1 (57´) Montejo.

Árbitro: Expósito Jaramillo (comité andaluz). Tarjetas amarillas a Gallardo, Calleja, Maganto, Íker; Campillo, Porrúa, Julio Rey y Diego Diz.

Incidencias: Vicente del Bosque. Unos 300 espectadores.

“Nos está faltando concentración”

Tenía bien claro Jorge Otero que “Estuvimos bien. Hacemos más cosas bien que mal como para no conseguir puntuar. Nos está faltando concentración individual en momentos puntuales para no cometer determinados errores que nos están costando goles y puntos. Hicimos un buen partido ante un equipo del que sabíamos sus virtudes. Los controlamos bastante bien y jugamos durante muchos momentos en campo rival. Tuvimos llegadas, no muy claras, pero sí las suficientes como para no irnos con cero puntos”.

Lamentaba el entrenador del Arosa la acción del 1-1, “nos faltó contundencia porque sabíamos que el Adarve a balón parado es un equipo fuerte. Nos faltó la responsabilidad individual y no puede excusarse en la colectiva. No nos puede rematar donde remató y para ellos fue una gran inyección de adrenalina”.