Era uno de esos partidos de valor doble para salir de la zona baja de la tabla y el Cortegada se quedó muy lejos de ser el equipo que asombró durante 30 minutos a todo un Baxi Ferrol hace solo siete días. La visita al Maristas, no solo trajo la peor versión del equipo ahora entrenado por Javier Nogueira, sino también una derrota incontestable ante un rival directo ante el que incluso cedieron el average.

La mala puesta en escena de las vilagarcianas se convirtió en una losa. Un parcial inicial de 11-0 no hizo más que reafirmar a las coruñesas en sus posibilidades de triunfo. Maristas estaba desarbolando a un Cortegada que incurría en numerosas pérdidas de balón.

A base de una mejoría en la intensidad defensiva, el Cortegada fue tomándole el pulso al partido (14-7). Desafortunadamente, el intento se quedó en un espejismo puesto que el cuadro local enseguida volvió a encontrar caminos expeditos hacia el aro.

El 29-14 con el que se cerró el primer cuarto obligaba a remar contra la corriente a un equipo muy limitado en sus recursos físicos y de rotación. Un atisbo de aparición de la puntería, hizo que el Cortegada recuperase el ánimo. Pero costaba mucho enlazar tres buenas acciones consecutivas. Un hecho que ayudaba al Maristas a dominar a su antojo el control del partido.

El esfuerzo del equipo de Javier Nogueira se mantuvo en todo momento. Tocaba aumentar el ritmo, pero de ello solo hubo una auténtica dominadora y fue la base portuguesa Joana Pereira con una exhibición que proyectó a su equipo hacia una victoria muy cómoda.

El desgaste acumulado se hizo más evidente en el tramo final donde la diferencia fue aumentando paulatinamente alimentando las malas sensaciones de un Cortegada que pierde el paso en su intención de salir de la zona baja de la clasificación.