La Tercera División echará a andar este próximo fin de semana, tal y como estaba previsto. La Real Federación Gallega mostró a los 24 clubes participantes su total predisposición a colaborar en las cuestiones derivadas de la seguridad sanitaria, velando en todo momento por la economía de los clubes.

En la reunión celebrada ayer en Santiago se trataron diversos temas relacionados con el nuevo formato de competición y con el protocolo sanitario elaborado por la Federación Española y aprobado por el Consejo Superior de Deportes para la puesta en marcha de la competición.

El presidente Rafael Louzán, consciente de las dificultades que están pasando los clubes en la situación actual de pandemia, informó que la Federación Galega y la RFEF están dispuestas a apoyar a todos los clubes en la financiación de la nueva figura del jefe médico que exige el protocolo poniendo a disposición de los 128 clubes gallegos de las categorías de ámbito estatal una estructura médica.

Louzán indicó también que en lo referente a los test, la RFEF comprometió una importante línea de ayudas para la financiación de los dichos test, medida que aliviará la situación económica de las entidades después de tantos meses de inactividad.

También se informó a los clubes que la Federación Española mantendrá la cuantía de sus ayudas a los clubes de ámbito estatal siempre que mantenga sus ingresos. La Federación Gallega, por otra parte, ha alcanzado un acuerdo con la CRTVG para la retransmisión de partidos de Tercera, con un incremento del 20 por ciento respecto al contrato anterior.

Aunque la reunión, que comenzó a las 19.30 horas, se prolongó hasta casi las 23.00, el punto prioritario, que era el inicio de Tercera División, pudo votarse antes y pasadas las 21.00 se hacía público el beneplácito de los clubes. Aunque ha sido por mayoría, no por unanimidad.

Otra de las cuestiones es la relativa a la situación de restricciones que se viven en Ourense. En este sentido, la intención no es aplazar ningún encuentro con equipos ourensanos implicados. Todos los clubes contarán con un salvoconducto otorgado por las autoridades deportivas y sanitarias para que se pueda desarrollar el partido en base al cumplimiento estricto del protocolo establecido.