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fútbol

Pazos: "Fue una sensación agridulce"

El portero, vital en el triunfo del Ribadumia ante el Viveiro, lamenta la falta de la afición

Pazos, golpeando el balón durante el duelo ante el Viveiro. // FdV

El Ribadumia ha hecho historia con su clasificación para la ronda previa de la Copa del Rey. Detrás de este éxito existen muchas personas que han llevado al club al lugar donde nunca antes había llegado, pero el que tuvo que ponerle la rúbrica fue Roberto Pazos con una parada en la tanda de penalties que fue providencial.

En su valoración de lo que fue el choque, el veterano portero cambadés destacó que "después de llevar tanto tiempo sin competir y sin preparación había incertidumbre. En la primera parte el ritmo no fue lo que habíamos previsto. El césped tampoco ayudó porque el balón no rodaba. Y en la segunda parte se vio un poco más de los dos equipos porque se regó y el ritmo fue otro".

El empate a unos definitivo obligó a los tiros desde el punto de penalti en el que Roberto Pazos se lo puso muy difícil a los viveirenses acertando la dirección de todos los lanzamientos y parando uno para que Diego Abal sentenciase a continuación. "La verdad es que trabajamos en el último entrenamiento la posibilidad de tener que ir a penalties. Hubo un trabajo previo de nuestro entrenador de porteros que fue muy importante para acertar las direcciones. También mis compañeros estuvieron muy bien para marcar los nuestros".

Precisamente el nuevo reglamento, que obliga a mantener contacto al portero en todo momento con la línea de gol, fue un inconveniente añadido. Apunta Pazos que "al tener que situar los dos pies encima de la línea no te puedes anticipar. Te obliga a tener un tren inferior tremendo para poder llegar a los balones que van cerca de los postes. Lo que me fastidiaba es que el árbitro parecía fijarse más en lo que yo hacía que en el otro portero y de ahí que me quejase porque consideraba que estaba en desventaja".

De lo que tampoco le cabe duda al portero aurinegro es que "fue una sensación muy agridulce. El no poder compartirlo con nuestra afición se hace duro porque fue un momento muy importante de la historia del club. Todo muy descafeinado y me supuso una tristeza bastante grande".

Ahora una eliminatoria previa de la Copa del Rey y, en caso de superarla, ya podría tocar un rival de Primera División que no participe en competiciones europeas, "sería un sueño llegar a esas instancias. De momento disfrutaremos de lo conseguido por nosotros y por los que nos ayudaron antes y ahora no están. Y también nuestro agradecimiento a la directiva que está haciendo todo lo que está en sus manos y más para que podamos jugar al fútbol anteponiendo siempre la salud a cualquier cosa".

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