La motivación inicial a la hora de empezar a hacer deporte aprovechando el confinamiento también tiene que superar diversas fases para que ese entrenamiento se convierta en un hábito saludable.

"Debemos ser constantes en el entrenamiento, tener una frecuencia adecuada de 2-3 días semanales puede ser adecuado, pero dada la situación podemos separar los días de ejercicio cardiovascular de los días de entrenamiento de fuerza para así conseguir mejores adaptaciones", apunta el responsable de BuenaForma.

Otro de los errores que convendría evitar a la hora de entrenar de manera domiciliaria es el relativo a la falta de concentración en la tarea, "usar música para motivarse es lo más recomendable y después olvidarse de internet y del móvil o la televisión".

Buen conocedor de las dificultades de la constancia en la práctica deportiva, Héctor Tarrío señala que "el principal error que hemos visto en estas semanas es que hemos comenzado con mucho ímpetu a entrenar. Las redes sociales te animaban a realizar ejercicio prácticamente todos los días, incluso varias veces al día. En cambio semana a semana esta motivación ha ido descendiendo. El aburrimiento y la falta de adherencia es la mayor lucha que tienen los profesionales del ejercicio. La mejor recomendación que puedo dar es que disfrutemos entrenando y hagamos los entrenamientos divertidos además de eficaces".