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Fútbol - Selección Gallega

Campeones en la zona cero

Trapero y Adrián Gómez, del Arosa, logran el título con la selección en la Copa de las Regiones UEFA en un partido que se jugó a puerta cerrada por el coronavirus

Róber, Adrián Gómez y Trapero en el entrenamiento de ayer en Vilaxoán. // Iñaki Abella

Dos jugadores del Arosa han pasado a formar parte de la selección gallega de fútbol aficionado que, el pasado miércoles, levantaba el título de campeón en la Copa de las Regiones UEFA en una disputada final ante Andalucía. El encuentro se jugó en uno de los campos que la Real Federación Española de Fútbol tiene en Las Rozas y finalizó con un 2-0 favorable a los gallegos. De los dos arlequinados, tan solo Adrián Gómez pudo disfrutar de jugar una final durante media hora, mientras Trapero siguió las evoluciones de sus compañeros desde el banquillo.

Más allá de la alegría de levantar un título con la selección, el partido estuvo marcado por un viaje a la zona cero española del coronavirus, Madrid. Sin apenas contacto con el exterior a los dos jugadores del Arosa no les pasó desapercibida la situación de psicosis que se vive en la capital de España. "Nada más bajarnos del avión en el aeropuerto de Barajas, nos encontramos con mucha gente con las mascarillas puestas, algo que nos llamó mucho la atención", explicaba Trapero. Durante los dos días que permanecieron en Las Rozas estuvieron prácticamente enclaustrados a la espera de que se celebrase el encuentro, sin tener apenas contacto con la gente del exterior. Durante esos días "era inevitable hablar entre nosotros de lo que está pasando, evidentemente, la preocupación existe por eso hay que cuidarse y tomar las medidas que se nos indiquen para esperar que se solucione, pero con todo lo que está ocurriendo y lo que dicen por la tele parece que la gente se sugestiona y se preocupa más", señala Gómez.

El encuentro con Andalucía, que acabaría ganando el combinado gallego con tantos de Carlos López (As Pontes) y Yelko (Bergantiños) se disputó a puerta cerrada y sin público, algo que les resultó extraño a los dos jugadores. Trapero, que vivió los 90 minutos desde el banquillo, reconocía ayer que "era una sensación rara porque el fútbol sin espectadores no tiene mucho sentido, pero se decidió así y hay que aceptarlo, pero lo lógico es suspender los partidos".

En esa opinión también coincide su compañero que lamentaba "la imposibilidad de que en las gradas hubiese gente, porque le daría otro colorido al partido, pero no ha quedado otra que adaptarse porque se hizo por prevención". Al igual que Trapero, Gómez insiste en que, de cara a la próxima jornada, "lo lógico ha sido suspenderlo, no solo por el hecho de que las gradas queden desangeladas, sino que en el fútbol modesto, muchos equipos cuentan con la taquilla para sobrevivir, y jugar a puerta cerrada sería un duro golpe para su economía, cuesta mucho conseguir el dinero para una temporada".

El parón al que se va a enfrentar el equipo en las dos próximas semanas es algo que ambos jugadores afrontan como "una incógnita; nuestra intención es seguir trabajando para estar lo mejor posible cuando se reanude la competición y pelear por cumplir una ilusión a nuestra afición, la de conseguir jugar el play off 27 años después". También esperan que este parón sirva para acabar con la situación que se está viviendo con el campo de A Lomba, del que llevan "exiliados" desde el pasado mes de noviembre. "Jugar en A Lomba nos daría un plus, tanto a nosotros como a nuestra afición, es una pena que nos hubiésemos visto obligados a disputar todos estos partidos en Vilaxoán, donde nos han tratado muy bien, pero creemos que si hubiésemos dispuesto de nuestro campo estaríamos en una situación más holgada y con más ventaja sobre los rivales, pero las circunstancias se han dado así", señalan.

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