El Arosa retorna a A Lomba el domingo con el claro propósito de empezar a encarrilar sus resultados en lo que al saldo como locatario se refiere. Por contra, el que estará dispuesto a que esa irregularidad se prolongue es un Arzúa que llegará a Vilagarcía con la vitola bien merecida de equipo revelación de la categoría hasta la fecha.
La quinta posición que ocupan los coruñeses, con los mismos 10 puntos que un Arosa que es sexto, es suficiente tarjeta de presentación para un cuadro recién ascendido. Sin embargo ese rédito no hace cambiar ningún tipo de perspectiva en el club. Alberto López, su entrenador, es rotundo a este respecto, "somos un equipo que para ganar un punto nos cuesta sangre, sudor y lágrimas. Tenemos que dar por encima de nuestro 100% y pensar en otra cosa que no sea la permanencia a final de temporada es engañarnos a nosotros mismos".
El nivel medio de la Tercera División es otra cuestión que aumenta, según López, la dificultad del objetivo marcado. "Somos el presupuesto más bajo de la categoría y tenemos una plantilla muy corta. Lograr la permanencia ya seria algo espectacular. Nos toca trabajar al máximo para poder llegar al término de la temporada con opciones reales de salvarnos".
Con solo 16 jugadores en nómina, cinco de ellos procedentes de categoría juvenil, el propio Alberto López reconoce que la clave de este buen arranque se encuentra en que "estamos compitiendo muy bien en base a ambición, concentración e intensidad. A excepción del partido en Vilalba en el que no estuvimos, la verdad es que en el resto de partidos hicimos las cosas muy bien".
La experiencia en la categoría del Arzúa se reduce a jugadores como Álvaro Varela, Íker Hurtado, García, Enjamio y el portero Israel. Además, ocho de los componentes del equipo son algunos de los que consiguieron el ascenso la pasada temporada.
Esta condición de equipo prácticamente novato en la categoría no es óbice para atenuar el grado de ambición con el que se presentarán en A Lomba el domingo. El entrenador arzuano subraya en este sentido que "necesitamos sumar puntos cuanto antes y en Vilagarcía no vamos a renunciar a nada, aún conscientes de la calidad del equipo que vamos a tener enfrente. Sabemos que es un equipo con mucho potencial y un entrenador con muchísima experiencia".
La errática trayectoria del Arosa en casa supone un halo de esperanza para las opciones del Arzúa de salir airoso, "han tenido debilidades en casa y eso es algo muy incómodo para un equipo que quiere jugar el play-off. Es una presión añadida y nuestro plan de partido pasa por hacerlo muy largo y jugar un poco con su ansiedad para encontrar algún contraataque. Estamos preparando el partido para buscar las debilidades del rival".
Respecto a los puntos fuertes de los vilagarcianos, el entrenador que llegó a Arzúa procedente de la Sarriana, destaca que "es un equipo que ataca muy bien sobre todo por el perfil izquierdo en situaciones de centro y remate. Tenemos que tapar muy bien a sus jugadores determinantes como Pedro Beda, Manu Rodríguez o Raúl Martiñán entre líneas. Es un equipo muy completo en todas las líneas".
