Vilagarcía también exporta goleadores. Un buen ejemplo es José Rivera, actual jugador del filial del Pontevedra, y que el pasado domingo ajustició al San Martín con media docena de goles. "No marcaba seis goles en un partido desde que tenía diez años", bromeaba el jugador tras el entrenamiento del Pontevedra. El delantero, que ha tenido alguna pequeña oportunidad con el primer equipo, fue el principal protagonista de la goleada de la jornada, y previsiblemente del año, en Primera Autonómica. El conjunto granate se impuso por un contundente 12-2 al San Martín, siendo la mitad de los goles obra de Rivera.

"Estoy muy contento por el equipo, por estar ahí arriba y a ver si ascendemos", comentó el futbolista, que ya acumula 23 goles en lo que va de temporada en Primera Autonómica; teniendo en cuenta que no ha jugado las 24 jornadas de liga porque algunos fines de semana ha ido convocado con el primer equipo, su media anotadora es, por lo menos, de un gol por partido.

"Llevaba tres semanas sin marcar, así que me vino bien", apuntó Rivera sobre los seis tantos que le endosó al San Martín en un encuentro muy bueno del filial granate. "Con balón estuvimos perfectos y siempre quisimos más. En la primera vuelta nos habían metido cinco ellos y estábamos "picados" y fuimos a por todas", comentó bromeando. Para el delantero, la clave de la abultada goleada estuvo en que "en la primera parte tuvimos diez minutos en los que metimos cuatro goles y se vinieron abajo".

El mismo domingo ya le dieron la enhorabuena sus compañeros y el entrenador del primer equipo, Luismi Areda, que lo animó a seguir trabajando, y es que seis goles en un solo partido es una llamada a la puerta del conjunto de Segunda B en toda regla. "Estoy aquí para lo que me quieran, si puedo tener más oportunidades, bienvenidas serán, estoy a su disposición", afirmó.

El delantero destacó que "tenemos que ir a por el ascenso y a ganar la liga, si se puede. No puede estar el filial en Primera Regional, hay que ascenderlo ya". El Pontevedra B es segundo, a cuatro puntos del líder, un Portonovo al que Rivera confía en alcanzar porque augurá que "ya fallará. Aún tenemos que jugar contra ellos en casa".

Entrenando todos los días con el primer equipo, este canterano del Arosa con paso por Deportivo y ahora Pontevedra, tiene claro que por trabajo no va a quedar, "me gustaría llegar a los 30 goles esta temporada con el filial y tener alguna oportunidad más con el primer equipo. Sé que está difícil, pero por ganas no va a quedar".