Él conocido como síndrome del buen padre se ha instalado en el Céltiga. Los isleños dejan en casa todo aquello que consiguen ganar fuera y ayer volvieron a demostrarlo al conseguir sacar un punto en uno de los campos más complicados de la categoría, el de O Couto, donde la U.D. Ourense se ha mostrado intratable. La igualada se gestó en una gran seriedad defensiva que permitió a los de A Illa regresar sin haber encajado un gol y después de tener alguna ocasión para llevarse los tres puntos, aunque faltó el acierto suficiente.
La primera parte dejo escasez de ocasiones. Mandó más la UD Ourense y se acercó al área en asociaciones entre Alfredo y Presas por la izquierda, en arrancadas de Marquitos o en llegadas por la derecha de Arce. Los dos equipos apostaron por la línea de tres centrales y dos carrileras, aunque sólo tuvieron profundidad los locales. Faltó claridad en los metros finales. El Céltiga optó por mandar a Igor a la guerra, y pocos balones ganó. Viti fue el mediocentro elegido para sustituir al sancionado Germán, con Durán y Presas como socios por dentro y Adrián y Marquitos como adelantados. En el 22, la primera ocasión clara, en una entrada de Adrián por la izquierda y pase atrás. Control, giro y disparo de Marquitos ante el que se interpuso un zaguero. Los de Javi Rey buscaron el gol a balón parado. Creó incertidumbre un saque de Pillado desde la izquierda que sobrepasó la primera línea. Pato se encontró el balón y no pudo retenerlo, pero no hubo finalizador. En el 32, Marquitos roba en campo propio y lanza la contra, para descargar en Arce. Su centro al segundo palo no pudo rematarlo Adrián.
El partido se reanudó con ritmo cansino. El Céltiga se replegó y descolgó a los de arriba para cazar la contra. La UD Ourense estuvo lenta con el balón, sin líneas de pase y con poca oferta de los adelantados. En el 56, Jacobo intentó una volea a córner de Pillado y se interpuso la defensa. Currás incorporó a Isma para dar descanso a Presas, mientras que Javi Rey refrescó el ataque con Álex Fernández por Edu Otero y la medular con Diego Lamas por Jacobo. Las réplicas de la UD Ourense tomaron dirección de portería, en disparos de Durán, Marquitos e Isma. Luis se sumó a la medular en la UD Ourense y perdió un balón que Pillado acabó con un disparo sobre el larguero. En el último cambio local, Dacoba reaparecía sustituyendo a Durán para buscar la chispa que faltaba en los ourensanistas. El partido se encaminó hacia su desenlace con él Céltiga embotellado, pero con su portero inactivo. Marcos Bermúdez solo tuvo que intervenir en el segundo de los cinco minutos de prolongación, al desviar un testarazo de Isma a centro de Alfredo. También vio una amarilla para arañar unos segundos en un asedio final que no fue a más.
La igualada no saca a los isleños de la zona de peligro. De hecho, continúan ocupando la penúltima plaza d ela clasificación, pero sí les llena de moral para las próximas jornadas de liga, donde van a enfrentarse a rivales directos en la lucha por escapar de la quema, tanto de los puestos de descenso como de los posibles arrastres que se van a registrar desde la 2ª B.
